10. El viaje de fin de curso Hemos previsto dividir los gastos de un viaje de fin de curso entre los 18 alumnos que tenian previsto ir, pero solo han podido ir 16 ¿En que porcentaje se ha incrementado el precio que tenia que pagar cada alumno por el viaje?
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Respuesta:
Bueno, quizá es una simplificación, pero el concepto es fundamental. Gastar más de lo que se ingresa es sumamente peligroso. Si este es su caso, hay que economizar como sea. Punto.
En muchos hogares, los ingresos mensuales son relativamente estables, pero los gastos varían. Unos meses se gasta menos y al final hay un poquito de superávit. Otros meses los gastos son mayores que los ingresos y se recurre al superávit de meses anteriores para pagarlos. Y así van tirando mes a mes, pero sin llegar nunca a controlar la situación. Los problemas surgen cuando hay varios meses seguidos en los que los gastos superan a los ingresos. Entonces se agotan los ahorros y no hay más remedio que pedir dinero prestado para atender a los pagos.
En realidad, es aconsejable que los gastos no superen el 90% de los ingresos, para poder ahorrar, como mínimo, el 10% restante cada mes. Este 10% se puede destinar a reducir las deudas, a crear un fondo para emergencias y a lograr los objetivos financieros a medio y largo plazo, como acumular capital para una adquisición importante y preparar la jubilación. Sin ahorro, nada de esto es posible. Sin ahorro nunca tendremos el control sobre la situación.
Evidentemente, cuanto más ahorre, antes logrará sus objetivos, contará con más opciones de inversión y dispondrá de más control sobre su vida y su futuro.
Así que ajuste su presupuesto, tanto si tiene problemas para llegara a fin de mes como si le hubiera gustado ahorrar un poco más. Para ello sólo hay dos opciones: aumentar los ingresos o reducir los gastos.
Las posibilidades para aumentar los ingresos pueden ser limitadas. Hay que asegurar la optimización de nuestra carga fiscal, para no pagar más impuestos de los necesarios, y consultar las ayudas y deducciones aplicables. Si la situación lo permite, podríamos intentar negociar un aumento de sueldo, cambiar de trabajo o buscar un segundo empleo. Pero como normalmente no está en nuestras manos aumentar los ingresos, lo habitual es tener que reducir gastos