Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas
Al regresar los setenta y dos discípulos de su misión, Jesús se estremeció de gozo, movido por el Espíritu Santo, y dijo: “Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque, habiendo ocultado estas cosas a los sabios y a los prudentes, las has revelado a los pequeños. Sí, Padre, porque así lo has querido. Todo me ha sido dado por mi Padre, y nadie sabe quién es el Hijo, sino el Padre, como nadie sabe quién es el Padre, sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar”. Después, volviéndose hacia sus discípulos, Jesús les dijo a ellos solos:
“¡Felices los ojos que ven lo que ustedes ven! Porque les digo que muchos profetas y reyes quisieron ver lo que ustedes ven y no lo vieron, oír lo que ustedes oyen y no lo oyeron”.
Palabra del Señor.
Reflexión
El texto de hoy revela el fondo del corazón de Jesús, la razón de su alegría. Nos presenta a Jesús en un “arrebato” de felicidad por el éxito de la misión de los 72, que, al volver, comparten con Él su experiencia misionera. La razón de la alegría de Jesús es la alegría de los amigos y agradece a Dios por la forma cómo el Plan de Dios obra entre la gente sencilla, que descubre que es capaz de transformar las cosas. Este momento revela el fondo del corazón de Jesús. Al escuchar la experiencia de sus discípulos y al percibir su alegría, Jesús también se siente feliz. La suya no es una alegría superficial, viene del Espíritu Santo.
Este importante texto contiene tres afirmaciones fundamentales: sólo el Hijo es capaz de revelar el verdadero rostro del Padre; la revelación del Padre se abre a los pequeños y se cierra a los sabios; todos los que están cansados y oprimidos pueden encontrar en Cristo alivio. La afirmación central es la primera; las otras dos le sirven de marco y expresan su contenido. Este texto nos lleva a cuestionarnos los falsos conceptos de sabiduría que tiene nuestra sociedad y conocer desde la luz de la enseñanza de Jesús qué es la verdadera sabiduría.
¿Qué acciones puedes realizar para transmitir la buena noticia o nueva a tus familiares, amigos o personas cercanas?
Respuestas
Respuesta dada por:
1
Respuesta:
La acción principal que puedo realizar para transmitir buenas nuevas de salvación es mí cambio interior ya que lo abunda en el corazón habla la boca. Un cambio interior se ve reflejado en nuestro accionar diario y es lo que busca Dios, fue lo que Jesús nos predicó.. Ser llenos del espíritu Santo para que nos guíe por la senda del bien y podamos traer más discípulos
Preguntas similares
hace 2 años
hace 2 años
hace 2 años
hace 4 años
hace 4 años
hace 7 años
hace 7 años
hace 7 años