Respuestas
Narrador protagonista: es como si habláramos nosotros mismos. Veamos un ejemplo:
Estuve durmiendo. Hoy me he despertado pronto. Voy a salir ahora, me siento especialmente motivado para divertirme.
Narrador testigo: Habla en primera persona, pero no es el protagonista. Un caso típico es el del doctor Watson en los relatos de Conan Doyle. El protagonista es Sherlock Holmes, pero el único que habla utilizando la primera persona del singular es Watson. Se le llama testigo porque suele ser un personaje que hace de testigo de los acontecimientos que se suceden en la narración. No interviene, o si lo hace es de un modo colateral y neutral.
Narrador en monólogo interior: intenta dar verosimilitud a personajes que de otra forma no la tendrían. Por ejemplo, en «El ruido y la furia», Faulkner pretende mostrar el retraso mental de un niño hablando como lo haría en realidad un niño así. Otro ejemplo sería mostrar un estado onírico, o alucinatorio, etc. El escritor en primera persona y monólogo interior opta por reproducir de un modo realista esos estados de conciencia que no son los normales, o bien para expresar sentimientos confusos, o ideas caóticas, etc. Dentro de los distintos tipos de narradores, es de los más difíciles de implementar.
Narrador poliédrico: es el que adopta varios puntos de vista desde el principio. Hay varios personajes que adoptan el rol de protagonistas, pero contando los hechos desde su perspectiva. Hablan en primera persona, pero cuentan distintas cosas, incluso sobre los mismos acontecimientos. Los sentimientos, pensamientos, fantasías, etc., se acomodan a cada personaje según sus características particulares. Es también, entre los tipos de narradores, difícil de manejar, puesto que hay que ponerse (por parte del autor) en la piel de cada personaje para darle su impronta particular, su voz única.