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¿Qué hacer en caso de quemaduras?
Para disminuir la profundidad y la extensión de una quemadura y así evitar las secuelas o minimizarlas, la primera atención domiciliaria es crucial. “Lo primero que se debe hacer es aplicar agua fría, de preferencia en la ducha, y retirar la ropa lo antes posible. Si la quemadura es por fuego y el menor está en llamas, se debe hacer rodar o tapar con frazadas hasta extinguir el fuego, aplicar agua fría y no retirar la ropa pues esta se encuentra adherida a la piel y se desprenderán juntas si son retiradas. En ambas situaciones se debe cubrir con toallas limpias y dirigirse a un servicio de urgencia”, enfatiza el especialista.
En el caso de quemaduras eléctricas, hay que desconectar la energía del aparato que provoca la descarga, evitando entrar en contacto directo con la víctima, ya que de lo contrario también se recibirá la descarga eléctrica. Si la persona sufre un paro cardíaco, relacionado con arritmias, se tiene que iniciar una reanimación cardiopulmonar básica, a la espera de un móvil de atención avanzada y se debe continuar con ella mientras el paciente es trasladado a un centro especializado. Las maniobras de resucitación no deben suspenderse.