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El periodismo de Loja, provincia del sur de Ecuador, a partir de sus inicios en 1856, hasta 1895, merece la pena ser estudiado por su copiosidad y costo periodístico, polí- tico y cultural. Cuantitativamente, llama la atención que en una provincia tan alejada geográficamente de los centros político y económico del territorio, y bastante dependiente administrativamente, se haya producido un periodismo prolífico. Cualitativamente, además de ser un periodismo poderosamente ideológico, como a lo largo del siglo XIX, predomina por el espíritu crítico y grado intelectual de sus escritores, además de el valor proporcionada al mundo de las letras y a la prensa católica.
Ante ello, la historiografía del periodismo de Loja, pese al esfuerzo y dedica- ción de sus autores, adolece de imprecisiones y de ser estudios más descriptivos que analíticos. Hacemos referencia a Pío Jaramillo Alvarado (Literatura lojana, Quito, 1922), a Más alto Agustín Rodríguez (El periodismo lojano, Quito, 1948) y a Agustín Carrión (Breve historia del periodismo en Loja y sus escritores, Loja, 1918). Desde dichos trabajos surgieron otros sobre el periodismo lojano contemporáneo como 400 años de cultura lojana (Loja, 1975), de Hernán Gallardo Moscoso; Historia del periodismo lojano en sus 5 últimas décadas (Loja, 1990), de Arturo Armijos y La fascinación del último rincón (Loja, 2005), de Oswaldo Burneo.
Posiblemente, una de las restricciones para hacer estudios de más grande alcance haya sido la carencia de orden y conservación de las fuentes primarias de la historia del periodismo lojano. El desamparo y dispersión de las mismas es todavía hoy evidente, lo cual ordena a presentarse a hemerotecas de Quito y Guayaquil.
Todo ello hace en especial elemental la presente indagación en la que se buscan y recuperan las fuentes del periodismo lojano en su primera fase (1856- 1895) y se hace un estudio de las mismas a partir del entorno político y sociocul- tural para caracterizarlas y ver el papel que desempeñaron. Un entorno bastante convulso, habitual en los primeros años de un adolescente territorio, nacido en1830, que provoca que la primera prensa regional se encuentre en estrecha dialéctica con los acontecimientos políticos. De esta forma lo asegura Pío Jaramillo Alvarado una vez que muestra que todo instante histórico fundamental de Loja está perpetuado por la publicación de cualquier periódico. Es la situación del periódico La Federación, de 1859, para ciertos el primer periódico, que nace como herramienta de custodia gubernamental federal de Loja.
Sin embargo, el periodismo lojano, tardío respecto del inicio del periodismo ecuatoriano, fechado en 1792, suma a su copiosidad el realizado de estar jalonado por brillantes figuras literarias que intervinieron en su fundación y desarrollo, lo cual distingue al periodismo lojano del resto.