Respuestas
Respuesta:
1. Los criollos se sentían relegados a un segundo plano por los peninsulares.
2. Los mestizos no eran tomados en cuenta, debido a que en su gran mayoría eran fruto de relaciones ilegítimas
3. Los indígenas, protegidos por las leyes de Indias, querían emanciparse de este tutelaje.
4. Las castas se encontraban en condiciones inferiores por su propio estado natural y en general el descontento era unánime.
5. España ya no era la nación unitaria en su moralidad y costumbres, pues los borbones habían llevado una conducta política extraña
6. Entre los criollos, la desigualdad, el despotismo del gobierno y la dependencia de España también generaban un conflicto social; para remediarlo proponían ser iguales ante la ley y separarse de una vez por todas de España.
7. Las leyes, costumbres y religión, llevaban atraso considerable y el subdesarrollo de la economía y el mal reparto de las riquezas estaba en manos de los Españoles
8. El establecimiento de un régimen de monopolios, gabelas y trabas, que dificultaba el desarrollo de la economía americana y frenaba el crecimiento de su capacidad productiva.
9. Su influencia se vio disminuida por el incumplimiento sistemático de la normativa, el contrabando y la escasa capacidad industrial de los territorios americanos.
Respuesta:
INDEPENDENCIA LATINOAMERICANA
La independencia de Latinoamérica
Se dio por causas internas y externas. Hubo una serie de conflictos armados en cada pueblo de Latinoamérica, los cuales tenían un solo objetivo, la independencia de cada pueblo.
Explicación:
Causas del movimiento de independencia en las colonias españolas
Cuando en Europa parecía menguar el fuego de la Revolución, se inició en las colonias españolas de América una acción reclamando su independencia de España. La causa esencial de este proceso fue la incapacidad de la metrópoli para hacer frente a las exigencias de reforma administrativa, renovación social y política y expansión económica de sus colonias. El mismo sentimiento de protesta contra la ineptitud del despotismo ministerial que estalló en España en 1808 contra Carlos IV, provocó la separación de los países americanos. Otras causas fueron de orden interno y externo. Entre las de este tipo están la difusión de los ideales enciclopedistas, el ejemplo de los Estados Unidos de América y el deseo de Inglaterra de romper el monopolio colonial español en América del Sur. Entre las causas internas figura el desarrollo del poder social de los criollos (blancos americanos), quienes aspiraban a poseer también el poder político. En todo caso, el triunfo de la Independencia se funda en la debilidad de la metrópoli, invadida por las tropas de Napoleón o sujeta a graves luchas políticas internas.
Actuación de los precursores en la Independencia de Latinoamérica
Entre los criollos residentes en las principales ciudades coloniales existió cierta agitación revolucionaria a partir de 1780. La fomentaban y mantenían ideólogos como Antonio Nariño, colombiano, propagador de las doctrinas políticas de los enciclopedistas franceses. Tal agitación se tradujo en una serie de golpes de mano y conjuraciones aisladas. La más importante fue la de los Comuneros de Socorro, que estalló en Nueva Granada en 1781. El primer sudamericano que procuró unir todos los esfuerzos de los separatistas en una acción común fue Francisco Miranda (1756-1816), Venezolano, natural de Caracas, luchó contra los ingleses en Norteamérica y fue general girondino en Francia. Desde Londres, donde tenía su cuartel general, preparó un desembarco en su patria, con el apoyo de Inglaterra y los Estados Unidos. Fracasó en Ocumare y Vela de Coro (1805), pero regresó a Londres con nuevos arrestos para fomentar su causa.
Las sublevaciones de 1810
La labor de Miranda y sus compañeros, así como la de los liberales criollos, tuvo ocasión de manifestarse en 1810, cuando el gobierno de la metrópoli se vio obligado a refugiarse en Cádiz ante el ímpetu de los ejércitos napoleónicos. Ya desde 1808 la actitud separatista se había manifestado en el acto de reclamar Juntas de gobierno americanas; pues bien, en 1810 éstas se impusieron en todas partes, con el propósito de adueñarse del poder y proceder luego a la proclamación de la Independencia. En Buenos Aires, los revolucionarios impusieron la Junta después de la jornada del 25 de mayo de 1810. En Santiago de Chile, los criollos, a ejemplo de los bonaerenses, impusieron su causa en los días 11 de junio y 18 de septiembre. En Caracas la revolución ya había estallado, con éxito, en las jornadas del 18 y 19 de abril, y Bogotá había seguido su ejemplo el 20 de julio. Por otra parte, en México, el cura Hidalgo se levantó en Dolores (16 de septiembre) y con un ejército de indios se dirigió contra la capital; su derrota y su ejecución no paralizaron la acción separatista mexicana, que halló otro caudillo en Morelos