Respuestas
Respuesta:
con lo que puedes hacer con él
Explicación:
el dinero puede hacer infinidad de cosas si tienes la cantidad necesaria, solo debes buscar que quieres con él ya sea un simple caramelo o comprar un auto. por lo cual es un gran incentivo
La motivación extrínseca es generada por una recompensa exterior. Puede venir en forma de alimento, actividades, prestigio social… y también en forma de recompensas materiales, como el dinero.
Por otro lado, la motivación intrínseca viene desde dentro. Cuando estás motivado intrínsecamente, el placer—o la recompensa—la obtienes por el mero hecho de hacer la actividad que estás haciendo. Es decir, la recompensa final no es el objetivo, sino el proceso en sí.
Así que el dinero es una motivación extrínseca—y eso tiene sus limitaciones
Se sabe que diferentes tipos de actividades se benefician más de uno de los dos tipos de motivación.
Por ejemplo, para tareas rutinarias o repetitivas, la motivación extrínseca es un buen impulso. De hecho, fue la estrategia que dominó el mercado laboral durante la revolución industrial. El trabajo en las fábricas era monótono y rutinario, y los trabajadores eran motivados con recompensas (o castigos) extrínsecos.
El problema es que las recompensas extrínsecas no funcionan tan bien cuando el trabajo es más abstracto, o creativo. La razón es que si estás pensando en que obtendrás un premio cuando termines la tarea, tu cerebro no estará 100% centrado en el proceso de completarla. Con una tarea monótona puedes escapar, pero con las creativas, tu rendimiento empeora.
Así que digamos que el dinero puede ser un buen motivador, pero siempre que la actividad no sea creativa
Además, el dinero tiene otros límites. No brinda satisfacción personal profunda, ni a largo plazo. Esa clase de satisfacción se consigue trabajando en tus valores y tu propósito.
El dinero está bien para ponernos en movimiento como estrategia casual, pero siempre que puedas busca razones intrínsecas para hacer lo que haces.