Respuestas
Respuesta:
Hola soy cristina Victoria
16 años
Espero que te ayude
Explicación:
Nadie puede obligarte a perdonar a alguien que te ha lastimado o insultado. Estás en tu derecho de sentirte molesto si se portaron mal contigo, si te golpearon, traicionaron o abusaron de ti de cualquier forma. Tampoco pueden hacer que olvides lo sucedido o que finjas que nada ocurrió. Ninguna persona —ni siquiera tus padres o tus maestros— tiene el poder de exigirte que disculpes a quien te ha provocado algún mal si tú no deseas disculparlo. Eres libre de sentir indignación, furia y deseos de venganza. El perdón, para ser auténtico, debe partir del interior de cada quien y depende de la voluntad individual. Sólo tú y nadie más puede decidir ejercer esta virtud.
El perdón es uno de los valores más difíciles de llevar a la realidad. Es una decisión personal que requiere valor y mucho esfuerzo, pues va en contra de los sentimientos de enojo y venganza que experimentamos cuando alguien nos lastima. Si otra persona nos humilla o golpea, nuestra primera reacción es responder de la misma manera, y cuando no podemos hacerlo, nos sentimos frustrados y molestos, llenos de sentimientos negativos hacia el otro. Lo último que queremos en tales circunstancias es perdonar. Pero precisamente porque es uno de valores más difíciles de practicar, el perdón es tan importante. Gracias a él, los seres humanos hemos podido vivir juntos a pesar de nuestras diferencias y hemos logrado superar el odio que enfrenta a las personas. También es gracias al perdón que, en ciertos momentos de nuestra vida, podemos seguir adelante, dejar atrás el pasado y recuperar la alegría de vivir. A nivel personal, el perdón puede hacernos sentir liberados: nos quita de encima la pesada carga del resentimiento que, muchas veces, nos impide ser felices. Esto no significa, por supuesto, que dejemos de exigir justicia. Podemos perdonar a un ladrón si éste muestra arrepentimiento y devuelve lo que se robó; sin embargo, ello no quiere decir que sus acciones carezcan de consecuencias: con nuestro perdón o sin él, cometió un delito.