• Asignatura: Castellano
  • Autor: cindygonzalez1903
  • hace 2 años

relata con tus propias palabras 5 leyendas ecuatorianas​

Respuestas

Respuesta dada por: damarisyugla7769
2

Respuesta:

1- Cantuña y su pacto con el diablo.

Se dice que en tiempos de la Colonia, un indio llamado Cantuña se comprometió a construir el atrio de la iglesia de San Francisco. ... Una noche, antes del plazo estipulado, Cantuña desesperado pactó con el diablo para que culminase la obra antes del amanecer. Como pago le daría su alma.

2- La doncella de Pumapungo.

Estas mujeres eran educadas desde niñas en distintas artes y habilidades que usaban para entretener a los emperadores. Nina era una de las Vírgenes del Sol residentes en Pumapungo y aunque estaba prohibido, se enamoró perdidamente de uno de los sacerdotes del templo.

3- El Guagua Auca.

Se dice que el Guagua Auca es un demonio creado por el alma de un niño que nació y murió sin llegar a ser bautizado. Éste aterra a borrachines en los caminos a altas horas de la noche. Cuentan que muchos han sido encontrado muertos y con espuma en la boca como resultado del encuentro con el Guagua Auca.

4- Los orígenes de los Cañaris.

La leyenda del origen de los Cañaris, nos cuenta la procedencia de este aguerrido pueblo, tribu que pobló la parte sur del Ecuador en lo que hoy es Azuay y Cañar principalmente, aunque se han encontrado vestigios de su cultura en las provincias de Loja, Chimborazo, El Oro y Morona Santiago

5- La veleta de la catedral de Quito.

Esta difundida leyenda que atesoran los habitantes de Quito se refiere a don Ramón Ayala y Sandoval, quien era un hombre adinerado, muy bohemio y dedicado a la buena vida; además mantenía indiscutible afición por la vihuela (guitarra), mistela (licor) y la graciosa 'chola' Mariana, que le robaba más de un suspiro

Explicación:

espero te ayude

Respuesta dada por: hellenrocasprilla
1

Respuesta:

Cantuña y su pacto con el diablo

Cantuña era un respetado indígena en los tiempos coloniales al que le fue encomendada la construcción del atrio de la Iglesia de San Francisco en Quito.

La paga por dicha labor era muy buena, pero la condición era que debía realizarse en el menor tiempo posible. Cantuña entonces decidió vender su alma al diablo con la condición que todas las piedras del atrio estuvieran allí puestas antes de que salieran los primeros rayos del sol.

Éste grabó en una piedra que cualquier persona que la tocara reconocería únicamente a Dios.Tres pequeños demonios que trabajaban esa noche no pudieron tocar la piedra y dejaron incompleta la construcción.

Cuando el diablo llegó para llevarse el alma de Cantuña, éste reclamó que la obra no había sido completada y que por tanto no se podía cumplir el trato, ganando su alma de vuelta.

2- La doncella de Pumapungo

Pumapungo, localizado en Cuenca, era el destino de descanso preferido por los emperadores incas. Este lugar estaba impresionantemente decorado y hoy en día es posible visitar sus ruinas. El lugar contaba con una fuente sagrada que era usada exclusivamente por el emperador. También se encontraba atendido por unas doncellas conocidas como las Vírgenes del Sol. Estas mujeres eran criadas desde pequeñas en distintas artes y habilidades que usaban para entretener a los emperadores.

Nina era una de las Vírgenes del Sol residentes en Pumapungo y aunque estaba prohibido, se enamoró de uno de los sacerdotes del templo. Este par solía reunirse en las noches de luna llena en los jardines del lugar.

Cuando el Emperador se enteró de este hecho mandó a matar al sacerdote, pero prohibió que se informara a Nina de esto.

La doncella al ver que su amante no acudía a sus encuentros finalmente murió de pena moral. Se dice que hoy en día en las mismas noches de luna llena se puede oír su lamento entre las ruinas del lugar.

3- El Guagua Auca

Se dice que el Guagua Auca es un demonio creado por el alma de un niño que nació y murió sin llegar a ser bautizado. Éste aterra a borrachines en los caminos a altas horas de la noche. Se manifiesta con un chillido incesante que desespera a cualquiera.

Los incautos sin saberlo buscan el origen del chillido hasta que encuentran lo que parece ser un niño envuelto en una manta. Más tarde las personas descubren como la fisionomía del supuesto niño cambia y se dan cuenta de que en realidad estaban cargando a un demonio.

Cuentan que muchos han sido encontrado muertos y con espuma en la boca como resultado del encuentro con el Guagua Auca.

4- Los orígenes de los Cañaris

Los cañaris eran una etnia que estuvieron asentadas a lo largo de las provincias de Azuay y de Cañar. El término cañari viene a ser descendientes de la culebra y la guacamaya, lo que da una pista sobre la leyenda que se ha formado acerca de sus orígenes.

Según cuenta, en aquellas tierras Pachamama mandó un diluvio que cubrió hasta la cima de la montaña más alta. Todo se destruyó y solo dos hermanos sobrevivieron, los cuales estuvieron viviendo en la cima esperando a que el nivel del agua bajara.

A punto de morir por hambre, los hermanos descubrieron una cueva en la que había comida. Al día siguiente volvieron y de nuevo apareció comida. No entendían como llegaba hasta allí, hasta que un día se percataron que dos mujeres con forma de guacamaya eran las que dejaban allí el alimento cada día.

Los hermanos y las guacamayas se enamoraron y tuvieron muchos hijos, siendo los primeros pobladores del Cañar moderno.

5- La veleta de la catedral de Quito

Durante la etapa colonial de Quito vivía en la ciudad un poderoso caballero lleno de riquezas, pero también de orgullo y prepotencia. No dudaba en insultar o despreciar a todo aquel que se cruzase por su camino, ya que se sentía el hombre más importante del mundo.

Tanto era su desprecio por todo, que un día volviendo borracho a su casa se detuvo frente a la majestuosa veleta en forma de gallo de la catedral de Quito. La observó y de sus palabras solo salieron barbaridades como “¡ese gallo es patético!”, “¡Menuda broma de gallo!” o “Es más bien un gallito en vez de gallo”.

Para sorpresa del caballero, el gallo tomó vida y se descolgó de la veleta, atacándole ferozmente. Le hizo heridas por todas partes y luego volvió a su posición original.

A la mañana siguiente, el hombre despertó con todas las marcas de picotazos y sangre por el cuerpo. No supo si fue verdad o producto de su imaginación por los efectos del alcohol, pero desde entonces no volvió a pasar por delante de la catedral ni abrió el pico para humillar a nadie más.        

espero te ayude

Preguntas similares