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Muchos adolescentes que llegan a este país en compañía de sus padres, sin documentos migratorios, tienen que enfrentar una gran cantidad de problemas antes de que puedan comenzar a vivir una vida normal.
Uno de los mayores problemas que enfrentan es cómo encontrar un trabajo para ayudar a sostener a la familia. Aunque esto es muy importante, no es la cosa más importante que un niño tiene que hacer. La actividad más importante que un niño puede realizar es ir a la escuela. La asignación del trabajo con una prioridad más alta que la escuela puede llevar a muchos problemas en el futuro y, de hecho, puede dañar la posibilidad de un joven de cambiar su situación migratoria.
De acuerdo a las leyes del país, todos los niños (menores de 18 años) deben asistir a la escuela. Esto incluye a todos los niños y jóvenes sin importar su situación migratoria. La sociedad estadounidense cree que una buena educación conduce a un futuro exitoso para nuestras comunidades, la sociedad en general y de nuestras familias en particular. Una razón más práctica para que los niños empiecen a ir a la escuela inmediatamente después de entrar en este país es porque les ayuda a establecer residencia y crea un patrón de comportamiento que es muy importante cuando se aplica para un proceso migratorio.
Asistir a la escuela a menudo no es una de las principales preocupaciones para las familias cuando entran por primera vez al país, ya que sólo están pensando en el corto plazo (encontrar un hogar y un trabajo) en lugar del largo plazo (obtener estatus legal). Esto se ha convertido en un gran problema para muchos solicitantes de Acción Diferida (DACA) porque uno de los requisitos para el programa consiste en demostrar su llegada a los Estados Unidos antes de cumplir los 16 años de edad. Para el 99% de estos jóvenes, no hay forma de probar su residencia sin los registros escolares. Esto se debe en parte al hecho de que los niños no están autorizados legalmente a trabajar en este país hasta después de cumplir 16 años de edad.
Sin embargo, si un niño trabajó en un empleo antes de cumplir 16 años y tiene documentos que prueban esto, es muy improbable que los documentos puedan ser utilizados para fines de inmigración, ya que potencialmente podría causar graves problemas jurídicos al empleador.
Por lo tanto, sin registros escolares, muchos solicitantes de DACA no pueden demostrar que entraron en los Estados Unidos hasta varios años después de que cumplen los 16 años y como resultado de ello, son incapaces de aplicar para el proceso de Acción Diferida.
La mejor decisión a largo plazo para una familia de inmigrantes en los Estados Unidos es matricular inmediatamente a sus hijos en la escuela y hacer de la escuela una prioridad en la vida de sus hijos. Además de crear un "rastro de papel" para ayudar en el proceso de inmigración, una buena educación puede llevar muchas oportunidades para el niño y su familia incluyendo becas escolares y mejores oportunidades de trabajo en el futuro.
Explicación:
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