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Respuesta:
El éxito de la avicultura depende, poco más o menos, con exclusividad de quien la mantiene, pues el ave se encuentra recluida, y no tiene otra ayuda para vivir que la que el hombre le brinda.
El que se dedica a criar gallinas tiene, la obligación de conocer las necesidades y costumbres de las aves, para proporcionarles los medios de satisfacerlas.
El fracaso en avicultura es casi siempre fruto de los imprevistos o no conocer sobre el tema.Terreno
El lugar ideal, para colocar un gallinero es el terreno fértil, permeable y bien asoleado.
Pero no siempre se puede encontrar el terreno ideal cuando se trata de hacer el gallinero en el patio de la casa.
El lugar debe ser: alto, seco, de fácil desagüe.
Si fuese bajo, necesitamos levantar su nivel, rellenándolo con tierra.
El agua no debe frmar charcos en el gallinero. Nada perjudica tanto a las gallinas como la humedad.
Corrales
El avicultor podrá hacer dentro del gallinero el numero de corrales que quiera y pueda, separando las aves por raza, por planteles, para comodidad del trabajo, etc.
Queda librado a sus deseos y posibilidades.Pero es de importancia tener al menos, una división que separe las gallinas, de los polluelos en crecimiento.
Hay pues, que instalar a los pollos en corral y dormidero aparte.
Si se hace el dormidero para los pollos a continuación del que corresponde a las gallinas, separado por un simple tabique de alambre tejido o, lo que es lo mismo un dormidero grande dividido en dos secciones, una para gallinas y otra para pollos disminuye el gasto.
La alimentación de las aves adultas no es apropiada para los pollitos.
Por ello se proporcionara a cada madre y sus crías una caseta y corralito aparte. Que pueden ser un cajón y un cercado de tablas cubierto con alambre tejido.
El Dormidero
Cuatro condiciones debe llenar el dormidero. A saber: buena orientación; buenas dimensiones; buena construcción; buen piso.
Orientado hacia el sol, durante la mañana y tarde.
De esta forma se mantiene seco y sano.
De medidas que faciliten comodidad para las aves y para el trabajo del hombre.
Las aves necesitan ejercicio para mantenerse en buena salud, y el amontonamiento les es perjudicial Une espacio de un metro cuadrado por cada dos o tres gallinas es una superficie que no las obliga a amontonarse y les permite una suficiente actividad.
Una altura de 2,20 metros en el frente y 1,50 mts, en el fondo, ayuda al trabajo y la entrada del sol en el interior.
En concreto: si tuviese que construir un dormidero para aprox. 30 gallinas , las mejores dimensiones serían 4 metros de frente por 3 metros de fondo, y 2,20 metros, de altura en el frente por 1,50 de altura en el fondo.
La construcción no necesita ser lujosa. El fin es que, las aves permanezcan al abrigo del agua, de las corrientes de aire, y de los cambios bruscos de temperatura.
Lo importante es que las paredes no tengan hendijas o grietas que dejen pasar el aire. Por ser de daño para las aves, y prestan refugio a sus parásitos. El techo no debe tener goteras.
El frente se cierra con alambre tejido para que el sol penetre en el interior del local.
Las paredes de ladrillo deben revocarse aunque sea con barro, y por lo menos, del lado de adentro.
Una superficie bien lisa facilita la limpieza y no ofrece guarida a los insectos.
Conviene que el techo sobresalga en forma de alero, unos 20 a 30 centímetros, en los cuatro costados.
También es aconsejable cerrar el frente con un zócalo de unos 70 centímetros de altura.
El Piso
No debe ser ni agrietado, ni frío, ni húmedo. Un piso agrietado es difícil de limpiar.
El piso ideal es el de tabla machimbrada. Si se dispone de madera para el piso, lo practico es construirlo a una altura de unos 50 centímetros del suelo, sobre pilares de ladrillo o pilotes de madera dura.
Son accesorios del dormidero, las perchas o posaderos y los nidales.
Se construirán de tipo portátil de quita y pon, de madera que se puedan retirar para hacer su limpieza y desinfección cuando se desee.
Las Perchas
Conviene hacerlas con listones cuadrados de madera de 5 centímetros de espesor y con un par de aristas “chanfleadas”. Con esta disposición, la pata del ave agarra cómodamente.
La forma mas sencilla de colocar las perchas es a unos 70 centímetros de altura sobre el piso.
Explicación:
