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pueden salir heridos
espero te sirva xd
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Conozco a alguien que tiene más espíritu que Napoleón, que Voltaire, que todos los ministros presentes y futuros: la opinión pública. Charles-Maurice Talleyrand Périgord (1754-1838) Diplomático y estadista francés.
Siempre que se juntan unos individuos, se ve pronto apuntar y surgir una multitud. Se agitan, se mezclan, se metamorfosean. Adquieren una naturaleza común que da consistencia a la suya propia, se ven imponer una voluntad colectiva que hace callar la suya particular. En la muchedumbre la personalidad consciente se desvanece los sentimientos y las ideas de todas las unidades, son orientadas en una misma dirección.
Se forma un alma colectiva, transitoria que representa caracteres muy puros.
La colectividad entonces se convierte en lo que, a falta de una expresión mejor, pudiéramos llamar una muchedumbre organizada mejor aún una muchedumbre psicológica. *
En México y en el mundo entero las movilizaciones de personas en multitudes han sido desde hace muchos años, la forma de hacerse notar, de provocar cambios, de imponer su voz, o de acallar otras, de caída de dictaduras, de gobiernos y a veces de democracias consolidadas; sin embargo, algunas de ellas han sido tan perfectamente orquestadas que sus resultados dan mucho que opinar, ante la gente que, asombrada, todavía, reprueba ciertas conductas que sobre todo tiene relación con la violencia verbal y física y que denota un mensaje reprobatorio hacia la sociedad.
El comportamiento de las multitudes se relaciona con la causa de la manifestación o de la concentración, por supuesto que hay disímbolos motivos que hacen movilizar gente para posicionarse respecto de un tema de interés, a veces común ante la opinión pública y en ocasiones muy particular y fuera de contexto histórico o contemporáneo o siquiera de actualidad, es decir para cualquier motivo, se hace movilización de personas.
Hay en México movilizaciones de diferentes organizaciones y propósitos, que amparados en el artículo 6 de la constitución política que a la letra dice: La manifestación de las ideas no será objeto de ninguna inquisición judicial o administrativa, sino en el caso de que ataque a la moral, los derechos de tercero, provoque algún delito, o perturbe el orden público; el derecho de réplica será ejercido en los términos dispuestos por la ley.
Es ahí donde nos parece que hay despropósito en el fin de la manifestación cuando se genera violencia, se pierde el impacto positivo e impera el negativo, entonces la opinión pública se hace crítica y se divide. Y por desgracia o por fortuna, el fin no justifica los medios.
La división de la opinión pública se hace por temas, por intereses y por la información que posean sobre cualquier asunto que sea de interés común, esto como un distintivo peculiar para poder tomar parte, si le interesa opina, se manifiesta, si no le interesa también opina, aunque con ignorancia, pero no se manifiesta en el campo de la acción.
Entonces, ¿cuántas personas que acuden a una movilización saben siquiera el motivo por el que están ahí? Y que tanta manipulación existe en la gente para que acudan a una convocatoria en multitud. ¿quién sabe?
Es verdad que en toda multitud existen infiltrados, agitadores, con intereses contrarios al principal motivo de los ahí presentes, ni cómo saber cuáles y cuántos, pero el papel importante de la voz pública, los medios de comunicación, son los que, al final dan cuenta de lo que sucede y más si, por desgracia hacen a sus reporteros protagonistas, de esa misma noticia, como ha sido el caso de esta última manifestación de un segmento poblacional de mujeres, cuyo fondo en su motivo fue bueno, no así la forma.
Considerar que la libertad de tránsito es y será una garantía, perse, aunque su límite es el respeto a los otros, generar violencia para solicitar no violencia, es una antítesis desproporcionada. El contenido es loable, los resultados son otros.
Las ventajas son bastante buenas, cuando se tiene control de los ahí presentes, pero esto es difícil de contener porque en una multitud hay impulsividad, agresión, poco uso de la razón, moral, conservadurismo, sugestión, exageración y simplicísimo de sentimientos, intolerancia, autoritarismo, irritabilidad, contagio y sentimiento de poder invencible, por mencionar algunos, que igual poder tornarse en desventajas.
Estoy seguro que todo tipo de multitud en las calles, tiene un fin y un objetivo de suyo justificable sea en cualquier ambiente y tema de que se trate, el asunto es ver las ventajas y es que haciendo presencia se consigue al menos llamar la atención, solicitar, exigir, la desventaja es que no hay quien resuelva, atienda, haga agenda para que a priori pudiese dar un resultado