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Respuesta: No exite
Explicación:Escribimos cada día en el ordenador para uso profesional o personal. Son muchas las personas que trabajan con el ordenador día tras día tanto en oficinas como empresas pero también los usamos a todas horas en el ordenador: el mismo teclado para enviar WhatsApp, escribir emails, redactar informes importantes o poner el pie de foto de tu última imagen subida a Instagram. Si tienes práctica, seguro que sabes escribir sin mirar pero ¿sabes por qué están así organizadas las letras del teclado?
Los teclados que usamos habitualmente, sean en el móvil o teclados del ordenador o teclados mecánicos, tienen una disposición o distribución QWERTY, una distribución que se patentó a finales del siglo XIX. Fue Christoper Latham Sholes, dedicado a la mecánica, el encargado de encontrar este nuevo diseño. Se patentó en 1868 diseñada con la intención de optimizar la mecanografía pero pensando en escribir en inglés y utilizar las dos manos con el teclado del ordenador o la máquina de escribir. Aunque es el más habitual, no es el único teclado que existe y la disposición es diferente en otros. Eso sí, ex el más extendido y se lanzó con el fin de conseguir que escribir a máquina fuese más rápido y cómodo que escribir a mano.
Los teclados QWERTY vendieron los derechos a la empresa de máquinas de escribir E.Remington & Sons con el fin de mejorar la velocidad de pulsación de las teclas y las varillas de la máquina evitando los atascos. El éxito fue tal que los principales fabricantes de máquinas de escribir apostaron por esta disposición y también se lanzó cuando llegaron los primeros ordenadores personales. El sistema siguió a medida que avanzaba la tecnología y a día de hoy es habitual no encontrarlo solo en ordenadores sino en teléfonos, tabletas, etc.
¿Por qué se llama QWERTY?
Su nombre no tiene ningún misterio: QWERTY lleva su nombre por las seis primeras letras de la fila superior.
Evitar atascos
Si has usado alguna máquina de escribir alguna vez sabrás que cuando pulsas varias teclas de manera rápida, se puede atascar ya que ocupa el mismo espacio una que otra. Las barras de la máquina de escribir chocan y se atascan, sin volver a la posición original que nos permite seguir escribiendo nuevas letras. De ahí que naciese esta distribución con el fin e evitar atascos y escribir rápido sin tener que parar continuamente a desatascar. El teclado QWERTY evitaba tener que desatascar continuamente la máquina de escribir separando las piezas que ocupaban el mismo espacio. Con un mapa del teclado se separan los caracteres que usamos más a los extremos, como puedes ver en el tuyo, y se quedan en el centro las teclas que aparecen con menos frecuencia en un texto.
Si te fijas mientras escribes, es más y habitual que uses las teclas de los extremos, a los lados, que las del centro. Así se evitaron en su momento los atascos de teclado aunque aún hoy sigue siendo una opción popular el teclado QWERTY en un mundo donde las máquinas de escribir ya son sólo, salvo excepciones contadas, un objeto de decoración.