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1. Asocia los movimientos con palabras o cosas
Cuando estés en clase y te estén explicando los pasos es importante que vayas asociando mentalmente cada movimiento con diferentes cosas. Puede ser el ritmo, la voz del profesor, la persona con la que bailas... Toma consciencia de donde está cada parte del cuerpo y asóciala con figuras o formas que tú recuerdes.
En realidad, es por este motivo por lo que se inventaron los nombres de los pasos para cada movimiento y así facilitar el aprendizaje. Ya que repitiendo el nombre del paso y asociándolo con el movimiento es el primer punto para recordarlo.
2. Visualiza todo el paso en tu cabeza
Visualiza siempre el movimiento en tu cabeza. Visualiza la secuencia de manos, pies, brazos juntándola con el ritmo.
Es por esto que se graban los vídeos que nos ayudan a ver mejor el movimiento. Pero solo viendo el vídeo no recordarás el paso, ¡Tienes que verlo en tu cabeza!
3. Imagínate bailando y empezando el movimiento
Imagínate en la sala de baile bailando, pasándolo bien, habiendo hecho varios pasos y en un momento dado tienes las manos y los pies de una forma determinada. Imagínate entonces cómo empezar el paso en ese instante y prueba de empezar el paso con otra combinación de manos. Derecha con derecha, derecha con izquierda. Pero ¡Imagínatelo!
Puedes probar a explicar el paso a otra persona. Ayuda para combinar todos los puntos clave.
4. Sal a bailar y practica muchas veces
El punto más importante de todos es este. Practica, practica y practica. Sal a bailar y cuando estés bailando no tengas miedo y prueba los pasos nuevos. Ya los has asociado, los has visualizado y los has imaginado ahora solo tienes que bailar y disfrutar. Nadie nace aprendido así que no tengas miedo y prueba nuevas cosas, merece la pena.