Respuestas
Respuesta:
El petróleo ha sido indudablemente el producto de mayor importancia en
la economía y sociedad ecuatoriana a partir de 1972. Entre 1995 y 2004,
los ingresos petroleros aportaron con un tercio del total del presupuesto del
Estado1
, y el petróleo representó el 40% de las exportaciones. El peso de
este producto en las exportaciones totales ha ascendido al 55 % en 2004,
como resultado tanto de sus elevados precios recientes como de la expansión en la producción resultante de la construcción del oleoducto de crudos pesados (OCP) (Banco Central del Ecuador, 2005).
Pese a su elevada significación actual, el petróleo es un producto no
renovable, y sus reservas probadas son, en la actualidad, limitadas (4.630
millones de barriles en 2003), de forma que su explotación posiblemente
continuará sólo por dos décadas más. Además, el impacto ambiental de su
producción es significativo, en particular por sus efectos directos e indirectos sobre la deforestación y la pérdida irreversible de biodiversidad en la
Amazonía.
En este escenario estratégico y frágil, las políticas petroleras del Estado
tienen un rol fundamental, y su principal objetivo es generar las condiciones óptimas para revertir los recursos petroleros en una mejora sostenible
de las condiciones de vida para la mayoría de los ecuatorianos/as
Explicación: