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El cordero envidioso
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Fabula Cordero Envidioso
Adaptación de la fábula de Godofredo Daireaux
Esta pequeña y sencilla historia cuenta lo que sucedió a un cordero que por envidia traspasó los límites del respeto y ofendió a sus compañeros. ¿Quieres conocerla?
El corderito en cuestión vivía como un marqués, o mejor dicho como un rey, por la sencilla razón de que era el animal más mimado de la granja. Ni los cerdos, ni los caballos, ni las gallinas, ni el resto de ovejas y carneros mayores que él, disfrutaban de tantos privilegios. Esto se debía a que era tan blanquito, tan suave y tan lindo, que las tres hijas de los granjeros lo trataban como a un animal de compañía al que malcriaban y concedían todos los caprichos.
Cada mañana, en cuanto salía el sol, las hermanas acudían al establo para peinarlo con un cepillo especial untado en aceite de almendras que mantenía sedosa y brillante su rizada lana. Tras ese reconfortante tratamiento de belleza lo acomodaban sobre un mullido cojín de seda y acariciaban su cabecita hasta que se quedaba profundamente dormido. Si al despertar tenía sed le ofrecían agua del manantial perfumada con unas gotitas de limón, y si sentía frío se daban prisa por taparlo con una amorosa manta de colores tejida por ellas mismas. En cuanto a su comida no era ni de lejos la misma que recibían sus colegas, cebados a base de pienso corriente y moliente. El afortunado cordero tenía su propio plato de porcelana y se alimentaba de las sobras de la familia, por lo que su dieta diaria consistía en exquisitos guisos de carne y postres a base de cremas de chocolate que endulzaban aún más su empalagosa vida.
Curiosamente, a pesar de tener más derechos que ninguno, este cordero favorecido y sobrealimentado era un animal extremadamente egoísta: en cuanto veía que los granjeros rellenaban de pienso el comedero común, echaba a correr pisoteando a los demás para llegar el primero y engullir la máxima cantidad posible. Obviamente, el resto del rebaño se quedaba estupefacto pensando que no había ser más canalla que él en todo el planeta.
Un día la oveja jefa, la que más mandaba, le dijo en tono muy enfadado:
– ¡Pero qué cara más dura tienes! No entiendo cómo eres capaz de quitarle la comida a tus amigos. ¡Tú, que vives entre algodones y lo tienes todo!… ¡Eres un sinvergüenza!
Respuesta:
a ok
Explicación:
un niño que se llamaba enrique le gustaba mucho el fútbol tanto así que cada tarde de terminar la escuela se ponía su ropa deportiva y se iba a jugar con sus amigo el era el mejor jugador de fútbol en su equipo pero un día vino un niño nuevo el se llamaba Carlos que también le gustaba el fútbol en una de sus partidas Carlos logro superar a enrique y los demás del equipo dejaron de ver a enrique como el mejor a ser Carlos el centro de atención, enrique al estar inundado en los celos da su opinión de que Carlos no debe jugar mas en su equipo y los demás estaban en desacuerdo, Carlos al ser un buen amigo le da una idea a enrique que al jugar ellos dos como equipo las cosas irían mejor y al final el equipo de enrique y Carlos ganaron la final
jaja creo que esta muy largo :,,)
espero haberte ayudado ♥