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necesito elaborar una sistesis sobre este contenido.
ayuda por favor!!!! no sé hacer síntesis :(

La familia tipo ya no es la única opción.


La cultura afectiva y las leyes cambiaron y ahora crecen los hogares monoparentales, los ensamblados, los de padres del mismo sexo y los unipersonales.
Las nuevas familias llegaron para quedarse. Las ensambladas, las que se logran gracias a los tratamientos de fertilidad, las que adoptaron niños, las que están compuestas por dos mamás o dos papás, las unipersonales y la subrogración de vientre son algunas de las posibilidades para formar una familia hoy. La “tipo” – entre un hombre y una mujer con hijos propios- dejó de ser la única opción para una sociedad cada vez más diversa.

El modelo tradicional se desdibujó de manera notable en los últimos veinte años dando paso a una nueva cultura afectiva. Lo que atraviesa a todas estas células familiares es el amor: el deseo de las parejas de estar juntas, de generar un espacio positivo de crianza para los hijos y la prioridad de que cada integrante pueda ser la mejor versión de sí mismo, sin rótulos ni mandatos.

En este contexto, las familias han aprendido a abrazar a sus miembros del colectivo LGBTI, a aceptar que los jóvenes ya no quieran casarse o tener hijos, a que no necesiten una pareja para tenerlos y a integrar a “los míos, los tuyos y los nuestros”. Esto invita a todos a repensar sus creencias, a aprender de las diferencias y a incorporar valores como la libertad, la empatía y el respeto.

Ya se habla de lo plurifamiliar. Hijos extramatrimoniales; padres separados que conviven con sus hijos los fines de semana; parejas que traen al nuevo hogar a sus hijos de matrimonios anteriores. Lo positivo es que los niños crecen en ambientes con más referentes afectivos no sanguíneos (más padres, más abuelos, más hermanos, más tíos, más primos) que los quieren y acompañan durante su desarrollo.

Las cabezas de todos – en especial de las nuevas generaciones- están en proceso de cambio. Según la Segunda Encuesta Nacional Sobre Creencias y Actitudes Religiosas elaborada por el CEIL-Conicet y publicada el mes pasado, el 61,3% de los argentinos apoya que una pareja de gays o de lesbianas pueda adoptar niños y solo el 35,9% señala que el único matrimonio válido es entre el hombre y la mujer.

Estas nuevas configuraciones y desafíos de los hogares de hoy, fueron acompañados también en la última década por un marco legal que dictó la Ley 26.618 de Matrimonio Igualitario (2010), la Ley de Identidad de Género (2012) y la Ley 26.862 de Fertilización Asistida (2015).

Se modificaron las configuraciones, pero también las posibilidades de elección de las mujeres y los roles dentro de las casas. Las mujeres no solo quieren ser madres (y si lo eligen es cada vez más tarde) sino que se animan a otras búsquedas, ya no quieren depender de su pareja, pisan más fuerte en el mercado laboral y en muchos casos son las jefas del hogar. Los hombres, por su parte, sumaron horas a las tareas domésticas y de cuidado de sus hijos y luchan por tener más días de licencia cuando los chicos nacen. Los padres “no ayudan” en su crianza, la comparten.

Según Sergio Sinay, terapeuta y autor de varios libros sobre el tema, cuando no nos sentimos obligados a reproducir y mantener un modelo rígido de familia es cuando mejor estamos preparados para cofundar un verdadero espacio de amor. Desde esta perspectiva, como no hay dos personas iguales, cada vez que dos individuos inicien una familia, construirán algo nuevo, inédito.

La Reforma del Código Civil en 2015, fue la que terminó de “actualizar” el día a día de estas familias en constante evolución con la modificación de numerosos artículos: en el casamiento los conceptos de hombre o mujer se reemplazaron por “contrayentes”; la ley reconoció derechos a las parejas aunque no certifiquen la convivencia ni firmen un acuerdo; se estableció el divorcio exprés; se agilizaron los procesos de adopción y se creó una figura que reconoce los derechos y las obligaciones de la pareja de la madre o del padre que tiene a cargo el cuidado de los hijos.

Las próximas conquistas en el ámbito familiar, incluso las más silenciosas, ya están en marcha. Según Eva Giberti, psicóloga y defensora de los derechos de la mujer, cuáles sean dependerá “del grado de madurez que vayamos alcanzando de acuerdo con la época, con los avances científicos, con las caídas de los prejuicios y con las diversas formas de amar que seamos capaces de asumir”.

En síntesis, la tendencia muestra que se está afianzando una conciencia social mucho más centrada en las necesidades de las personas y no en los mandatos de las instituciones. Hoy, las familias no piden permiso y se crean a sí mismas.

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Respuesta:

La cultura afectiva y las leyes cambiaron y ahora crecen los hogares monoparentales, los ensamblados, los de padres del mismo sexo y los unipersonales.

El modelo tradicional se desdibujó de manera notable en los últimos veinte años dando paso a una nueva cultura afectiva. Lo que atraviesa a todas estas células familiares es el amor: el deseo de las parejas de estar juntas, de generar un espacio positivo de crianza para los hijos y la prioridad de que cada integrante pueda ser la mejor versión de sí mismo, sin rótulos ni mandatos. Las familias han aprendido a abrazar a sus miembros del colectivo LGBTI.

Se modificaron las configuraciones, pero también las posibilidades de elección de las mujeres y los roles dentro de las casas.

la tendencia muestra que se está afianzando una conciencia social mucho más centrada en las necesidades de las personas y no en los mandatos de las instituciones.

Esto invita a todos a repensar sus creencias, a aprender de las diferencias y a incorporar valores como la libertad, la empatía y el respeto.