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Pregunta: Después de asistir a un foro sobre emprendimiento a los 16 años, obtuve conocimiento sobre lo que los emprendedores pueden hacer para crear un impacto positivo en la vida de las personas. Desde entonces, he leído muchos artículos y libros sobre emprendedores y me he inspirado para convertirme en uno.
Sin embargo, mis padres no tienen fe en mí, no creen que vaya a tener éxito. Siempre se enfocan en los aspectos negativos, diciéndome que debería sólo encaminarme a conseguir un empleo estable y bien pagado. Me dicen que, si no me aferro a mis estudios, obtendré malas calificaciones y no podré conseguir un buen empleo.
Me encantaría cambiar la manera en que piensan sobre este tema. ¿Hay algún consejo que me pueda dar?
—Jason Wong, Malasia.
Muchos padres a menudo se sorprenden al enterarse de que muchos de esos ‘empleos estables y bien pagados’ simplemente ya no existen
Respuesta: Pienso que es grandioso que hayas asistido a un foro sobre emprendimiento con tan sólo 16 años de edad. Nunca se es demasiado joven para ser un emprendedor y es importante recordar que algunas de las ideas e innovaciones más grandiosas del mundo han provenido de jóvenes que enfrentan problemas al parecer insalvables con una firme determinación.
Mientras leía tu pregunta, Jason, me di cuenta de que yo pasé por una experiencia similar. Lancé mi primer negocio, la revista Student, cuando tenía 15 años de edad, mientras pasaba apuros para llevar el ritmo de mis clases de matemáticas y ciencias. Mi sueño era hacer de la revista un éxito, y sabía que me apasionaba ser emprendedor.
Como he mencionado antes, mi madre y mi padre siempre han apoyado mis objetivos, pero cuando les dije por primera vez que quería dejar la escuela para enfocarme en los negocios, ¡no estuvieron 100 por ciento convencidos! Como tus padres, les preocupaban las consecuencias que vendrían. Pero vieron cuánta pasión sentía, así que eventualmente me permitieron renunciar con una condición: pondría todo mi esfuerzo en hacer de la revista un éxito.
Lo hice. Mi pasión e ímpetu me ayudaron a mantenerme enfocado y a menudo me hicieron trabajar toda la noche. Pronto mis padres se convencieron de que podía hacerlo. (¡Mi madre incluso empezó a trabajar en artículos para nosotros!)
Josh, mi consejo sería que llevaras a tus padres al próximo evento relacionado con el emprendimiento a que asistas. Necesitan tener una experiencia que desafíe sus percepciones de nuestro campo. Apostaría a que si tu madre y tu padre empiezan a comprender por qué te entusiasma tanto iniciar un negocio, estarán más dispuestos a alentarte a perseguir tus sueños.
Aunque asistir a foros y convenciones puede ser increíblemente inspirador (yo lo debería saber, hablo en varios al año en todo el mundo para recaudar dinero para Virgin Unite, nuestra fundación dedicada al emprendimiento), la única manera concreta de demostrar a tus padres que estás en el camino correcto es salir y empezar.
Comprendo que no estás en libertad de poner fin a tu educación formal como yo lo hice, pero no poder renunciar a tus estudios no debería significar renunciar a tu sueño. Como expliqué en una columna reciente, empezar un negocio de medio tiempo mientras estudias puede complementar tu educación.