Respuestas
Respuesta: 1. Juega, simplemente lleva su atención hacia algo que calme su ira, hasta que su emoción haya cambiado.
2- si la cosa empieza a ponerse fea, cogerlo por los brazos y decir: ¿Te has quedado sin brazos? O, dónde queda el típico ¿vendo un saco de patatas?, o hacerte pasar por un personaje gracioso y cambiar el tono de voz
3- Ayudar a canalizar los sentimientos a través de la risa cambia el estado de ánimo y elimina la tensión que hay acumulada ante el conflicto aparente.
4- Haz que tu hijo se sienta poderoso, que se ría, cuanto más se ría menos espacio queda para mantener un comportamiento inadecuado
5- En ocasiones se comportan mal porque estamos desconectados nosotros de ellos y ellos de nosotros. Entonces aparecen las malas contestaciones, muecas incómodas, miradas desafiantes… y, simplemente, lo que se necesita en este momento es decir algo como: “Creo que todos necesitamos un abrazo…”
Explicación: Como madres/padres o docentes nos gusta que se sigan unos patrones, una educación y un respeto de forma continuada. Queremos niños perfectos que se porten bien día y noche pero eso es muy complicado. Siempre puede aparecer una conducta que no nos gusta o no creemos que sea apropiada. Recopilamos diferentes estrategias probadas para prevenir la mala conducta