Respuestas
Respuesta:
Que sigamos el ejemplo de María y que seamos sinceros y amorosos
Explicación:
espero que te ayude
Respuesta:
María es madre de Jesús, no es madre de Dios. Los cristianos respetamos a María, pero no la adoramos porque Jesús dijo: Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás (Mateo 4:10). Y también leemos en Hechos 4:12, como sigue: "Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos." "Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre," 1 Timoteo 2:5. (Nótese las palabras un solo Dios, y lo recalca San Pablo Apóstol, "Un solo mediador"). Dios proveyó la manera que el hombre Dios, el Redentor, naciera de una mujer, pero no lo engendrara un hombre, que fuera la cimiente de la mujer (Genesis 3:15), pero no fuera la cimiente del hombre, por medio de este milagro, Jesús recibió de María su cuerpo humano y por esto es verdadero hombre, y recibió del Espíritu Santo, su sangre divina, y por esto es verdadero Dios. María fue como humana como nosotros, pero ella fue elegida. Todos somos pecadores, y todos le decimos Salvador a Cristo y a Dios, porque nos salvo del pecado, del infierno y del temor, y por esto es que María Bendice al Señor, diciendo: "Y mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador (Lucas 1:46-47)". ¿Cómo puede ser su Salvador, si según se cree era sin pecado, a menos que halla otro significado Bíblico concerniente a la Palabra "Salvador"? David dijo: He aquí, en maldad he sido formado, Y en pecado me concibió mi madre (Salmos 51:5). La ciencia afirma que el embrión, el feto, el niño en el ceno de la madre en ningún momento recibe sangre de la madre, la sangre se produce en el embrión con la cimiente del varón. El hombre pecador, engendra mas pecadores, "por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios (Romanos 3:23)". Y citamos mas: "Ciertamente no hay hombre justo en la tierra, que haga el bien y nunca peque (Eclesiastés 7:20)". María no es nuestra madre, es la hermana de los verdadero hijos de Dios. Y los hijos de Dios son, como dice San Pablo: "los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios (Romanos 8:14)." Y si somos hijos de Dios, pues tendremos el testimonio del Espíritu a nosotros, tal como esta Escrito: "El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios (Romanos 8:16)".
Explicación:
Dame coronita plis