Respuestas
Respuesta:
En España se desarrollaron dos movimientos culturales y artísticos: el Renacimiento (siglo XVI) y el Barroco (siglo XVII). Ambos tienen características muy diferentes, pero se engloban bajo la denominación Siglos de Oro porque constituyen una de las de mayor esplendor cultural.
El Renacimiento supuso el triunfo de las ideas humanistas, la concepción del hombre como centro del universo, el denominado antropocentrismo.
La lírica renacentista se desarrolla en torno a dos grandes periodos: la poesía del primer Renacimiento y la poesía del segundo Renacimiento.
La prosa renacentista se desarrolló en dos direcciones: la prosa didáctica y la prosa de ficción.
El diálogo es el modelo formal más empleado en los textos en prosa del siglo XVI.
El término novela solo se empleaba para referirse a narraciones breves. El resto de las narraciones más extensas se designaban con términos como tratado, libro o historia.
El Barroco fue un periodo de pesimismo y desengaño. Se abandonaron todos los ideales humanistas y se volvió a la religiosidad más profunda.
Durante el primer tercio del siglo XII se desarrolló una primera generación de poetas que revolucionó por completo la concepción artística procedente.
Las características barrocas se concentraron en dos tendencias estéticas, tanto en la poesía como en la prosa: el conceptismo y el culteranismo, denominado también gongorismo, que buscaba crear una lengua poética culta.
Respuesta:
Uno de los legados más importantes y universales del Siglo de Oro español reside en su literatura, caracterizada por una “vulgarización” o acercamiento a las masas. Otros rasgos fueron la abundancia de temas, personajes y contenidos, que posteriormente se conocería como “barroco”.
Explicación:
e llama así porque fue dorado, realmente brilló. En los decenios transcurridos entre la publicación de la Gramática castellana, de Nebrija, en 1492, hasta la muerte de Calderón en 1681, en España aparecieron nuevas estéticas y nacieron géneros literarios
El idioma diplomático de los siglos XVI y XVII fue el español. Antecedió al francés y al inglés. Carlos I hablaba de forma fluida cuatro idiomas y afirmó que “el español es la lengua de los dioses”. A los obispos franceses les dijo: “Mi lengua española es la más bella y debería ser conocida por toda la cristiandad”