Respuestas
Respuesta: El mexicano no es una esencia, sino una historia; una historia que oscila entre máscaras que nos expresan y nos ahogan, pero que nos defienden de la mirada ajena; un conjunto de signos que constantemente buscamos interpretar para darle sentido a nuestra identidad. Parte de nuestra labor interpretativa ha sido indagar en nuestra historia. Los acontecimientos, dirían en la antigüedad, son más poderosos que los hombres. Tlatelolco nos revela un pasado que creíamos enterrado pero que constantemente irrumpe entre nosotros. Hay un antes y un después en la historia que nos define y que nos cuesta reconocer. Paz afirma: “Lo que ocurrió el 2 de octubre fue simultáneamente la negación de aquello que hemos querido desde la revolución y la afirmación de aquellos que somos después de la conquista”.
Explicación: En el centenario del asesinato de Venustiano Carranza, Memórica. México, haz memoria presenta esta exposición sobre el político coahuilense, puente entre dos épocas: los regímenes porfirista y revolucionario.
Durante el gobierno de Porfirio Díaz, Carranza fue presidente municipal, legislador local y federal y ocupó de forma interina la gubernatura de Coahuila. En los años de lucha revolucionaria (1910-1920) fue gobernador constitucional de su estado natal, primer jefe del Ejército Constitucionalista y presidente de la República. Desde los primeros años de vida política, Venustiano logró sus victorias desde condiciones adversas, pero la rendición o el desaliento nunca fueron opciones. En los años de guerra revolucionaria consiguió organizar un ejército para enfrentarse a Victoriano Huerta, responsable del asesinato de Francisco I. Madero en febrero de 1913. Las tropas de Villa y de Carranza derrotaron a las fuerzas que defendían el gobierno de Huerta y éste huyó del país.
Don Venustiano instauró en la Ciudad de México un gobierno provisional; al cabo de unos meses, abandonó la capital para instalar su gobierno en Veracruz cuando se vio en desventaja frente a las tropas de Villa y de Emiliano Zapata, adversarios ahora del constitucionalismo, y logró derrotarlos. Durante su gobierno se promulgó una nueva Constitución, quizá la herencia más trascendente del régimen carrancista.
Carranza luchó una última vez. El general más importante del momento, Álvaro Obregón, se unió a una rebelión contra el presidente y éste se quedó prácticamente solo, sin ejército. Los rebeldes lo conminaron a rendirse y a renunciar a su cargo. El coahuilense no claudicó, incluso sabiendo que su vida estaba en juego.
La diversidad de objetos digitales en diversos soportes: fotografías, cartas, telegramas, mapas y libros, utilizados en esta exposición forman parte del acervo de Memórica. México, haz memoria.