• Asignatura: Castellano
  • Autor: pedrazaortiz20
  • hace 3 años

ACTIVIDAD.- IDENTIFIQUE LOS VICIOS DE DICCIÓN EN EL SIGUIENTE EJERCICIO Y
REDACTE EN EL ESTILO FORMAL DEL LENGUAJE.
Sin embargo para Cristina no hubio regalo, todos se miraban con los ojos
entre si, murmuraban y sacaban conjeturas, de repente, entro pa entro don
Venancio con una empanada de aproximadamente de setenta centímetros
de diámetros y un ramo de rosas. Todo el lugar quedo envuelto en un
estirado silencio mientras don Venan se acercaba a Cristina. Al tenerla de
frente a él le dijo: Cristina te haces merecedora a la empanada gigante, por
ser la empleada más añeja de la empresa y por ser el queso que mis
empanadas no les puede faltar, pero me has demostrado de que olvidastes
en donde empezó esta empresa y cómo desde nimiedades se pueden realizar
muy grandes cosas, de manera de que me es imposible darte el cargo de
gerente de la nueva sucursal. No te endulces con deliciosos chocolates
porque quería guardar lo mas mejor para el final.​

Respuestas

Respuesta dada por: kori123
23

Respuesta:

Sin embargo para Cristina no hubo regalo, todos se miraban con los ojos entre si, murmuraban y sacaban conjeturas, de repente, entro Don Venancio con una empanada de aproximadamente de setenta centímetros de diámetros y un ramo de rosas. Todo el lugar quedo envuelto en un estirado silencio mientras Don Venancio se acercaba a Cristina. Al tenerla de frente a él le dijo: Cristina te haces merecedora a la empanada gigante, por ser la empleada más añeja de la empresa y por ser el queso que mis empanadas no les puede faltar, pero me has demostrado de que olvidaste en donde empezó esta empresa y cómo desde nimiedades se pueden realizar muy grandes cosas, de manera de que es imposible darte el cargo de gerente de la nueva sucursal. No te endulces con deliciosos chocolates porque quería guardar lo mas mejor para el final.

Explicación:

Respuesta dada por: danielakimverlichc
0

Respuesta:

Sin embargo, para Cristina no hubo regalo, todos se miraban con los ojos entre sí, murmuraban y sacaban conjeturas, de repente, entró Don Venancio   con   una   empanada   de   aproximadamente   setenta centímetros de diámetro y un ramo de rosas. Todo el  lugar quedó envuelto en silencio mientras don Venancio se acercaba a Cristina. Al tenerla de frente, él le dijo: Cristina te haces merecedora de la empanada gigante, por ser la empleada más experimentada de la empresa y por ser el queso que mis empanadas no les puede faltar, pero   me  has   demostrado   de   que  olvidaste  en  donde  empezó   está empresa y cómo desde nimiedades se pueden realizar muy grandes logros, de manera que me es imposible darte el cargo de gerente de la nueva   sucursal.   No   te   endulces   con   deliciosos   chocolates   porque quería guardar lo mejor para el final

Explicación:

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