• Asignatura: Religión
  • Autor: karloandreeretamozom
  • hace 3 años

¿Qué nos pide Dios para cumplir nuestro proyecto de vida? para hoy porfa


yosim31: Cumplir con sus mandamientos.

Respuestas

Respuesta dada por: paubeba14
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Respuesta:

Una de las afirmaciones que más me han causado emoción en la vida, ha sido la de entender que mi vida es un proyecto de Dios. Y quizá ha sido por que mi vida no la he llevado del todo como si fuera proyectada por Dios, ni tampoco porque creo que siendo proyecto de Dios, Él me tenga predestinado un plan para cumplir, sino que creo que mi vida va cumpliendo un proyecto de Dios que se confirma y reafirma con las opciones que he hecho.

Hay que estar muy atentos a otra enfermedad de nuestro tiempo: la impaciencia. Esta enfermedad moderna no nos deja muchas veces escuchar a Dios atentamente en el silencio, sino que nos lleva a la búsqueda de soluciones rápidas, de respuestas rápidas que no se conforman a la Voluntad de Dios. El Proyecto de Dios requiere que nos pongamos con un corazón escuchante, y entonces como Salomón, podamos discernir entre lo bueno y lo malo. (1Re 3: 9) Y requiere también paciencia para saber esperar el momento adecuado para escuchar a Dios.

RETIRARSE A UN LUGAR SOLITARIO

San Ignacio de Loyola recomendaba que fuera necesario retirarse de las actividades cotidianas para entrar en este Misterio de Dios. Y en la actualidad, las palabras de San Ignacio encuentran bastante eco cuando queremos descubrir el Proyecto de Dios para nuestra vida. Es necesario retirarnos a un lugar solitario para hablar con Dios.

Las cada vez más múltiples ocupaciones de cada día, los afanes, el teléfono celular, el Internet, la TV, las fiestas, los fines de semana de diversión, son a veces una tentación difícil de vencer, y al mismo tiempo son ocasiones para llenar nuestra cabeza y nuestro corazón con un ruido que nos impide escuchar la voz suave y firme de Dios. Estas voces se han convertido en los nuevos areópagos de nuestra misión, y en los cuales debemos trabajar para motivar a los jóvenes a pasar un tiempo a solas con Dios. Ellos y ellas sabrán que no están solos en esta búsqueda de Dios. Jesús mismo tomó muchos momentos de su vida para pasarlos a solas con Dios. Él sabía retirarse a lugares solitarios para entrar en contacto con su Padre, y en los Evangelios encontramos en muchas ocasiones que Jesús se retiraba. Y estos retiros que hacía eran tan profundos que muchas veces sus discípulos no sabían donde estaba.

Cuando los discípulos regresan de una misión, Jesús los lleva a un lugar solitario, no solamente para descansar, sino para hacer experiencia de Dios y en la soledad, descubrir el Misterio y la Presencia del único que daría sentido a sus vidas. Ciertamente, no quiero reducir la presencia de Dios solamente a los lugares apartados, puesto que Dios en su Majestad puede manifestarse donde quiere y cuando quiere; pero el retirarnos a un lugar solitario predispone nuestros corazones para el Encuentro con quien nos ha llamado desde el principio.

DEJARNOS TOCAR POR DIOS

Tanto amó Dios al mundo que envió a su Único Hijo. (Jn 3: 16)Es a veces imposible entender este amor de Dios, sobre todo cuando nos vemos en nuestras situaciones de pecado y de nuestras limitaciones. Sin embargo, ésta es la grandeza de Dios: es un Dios cercano a nuestra vida y a nuestra historia. Para Dios no pasamos desapercibidos como un grano de arroz en medio de una cazuela de paella. Desafortunadamente, a veces racionalizamos mucho este amor, sin dejarnos tocar por Dios y simplemente corresponder a su llamado de amor con amor.

En el discernimiento espiritual, no hay otra salida que dejarnos tocar por Dios. Esta es la única forma de distinguir lo bueno de lo malo. Es dejarnos conducir por Dios en el camino de la vida. Este Dios toca nuestras vidas no porque seamos mejores que otros, ni siquiera porque tenemos más capacidades que otros. La diferencia radica en nuestra respuesta, en nuestra capacidad para transformar nuestra vida a la Luz de Dios.

Cuando nos dejamos tocar por Dios, nuestra vida adquiere un nuevo sentido que se manifiesta en la forma de hacer el bien a los demás, y de ser capaces de transformar la historia, nuestra historia. Hoy en día es necesario contarles a los jóvenes una verdad trascendental: Estamos en el corazón de Dios, y lo único que hay que hacer es dejarnos amar por Él. Hay que abrirse al amor de Dios y corresponder a su amor.


paubeba14: espero que te sirva
Respuesta dada por: cristhiantuiran
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Respuesta:

Creer que mi vida es un proyecto de Dios, antepone la voluntad de Dios sobre la mía. Y preguntarse sobre la voluntad de Dios, nos lleva a pensar en el fin para el cual hemos sido creados. Dios, en su infinito amor, ha pensado en cada uno de nosotros como una opción para llevar a cabo su plan de salvación y para que este plan de salvación alcance a todos los seres humanos.

Explicación:

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