Respuestas
Respuesta:
Cuando en sesiones de psicoterapia procedo a explicar las emociones básicas (sorpresa, alegría, miedo, tristeza y rabia), los clientes con cierta facilidad, identifican las emociones “problema” de su propio caso. Las emociones mal reguladas que son más fácilmente identificadas, son la tristeza, el miedo y la rabia, que traducidas en trastornos clínicos se asocian a estados depresivos, ansiosos y de conductas de tipo agresivo, respectivamente.
Por lo general, en este punto, la sorpresa queda olvidada, no es identificada. No se tiene en cuenta. Es por eso, porque resulta bastante ignorada, que pienso que conocerla, entenderla y aprenderla a regular adecuadamente, es en realidad de gran interés psicológico.
Empecemos pues, por recordar qué función tiene esta emoción. Básicamente, la sorpresa es la emoción que se activa cuando aparece una NOVEDAD, un acontecimiento repentino e inesperado, ya sea externo (cuando nos felicitan con un regalo) o interno/cognitivo (cuando nos acordamos de un olvido que hemos tenido). Su función es la de PRESTAR ATENCION, preparar al individuo para que dedique toda su atención al objeto de la sorpresa, para poder afrontar de forma efectiva los acontecimientos inesperados. Se trata de una emoción que provoca un rápido aumento de la actividad cognitiva, en el sentido que al activarse el SISTEMA DE ALERTA, empezamos a procesar y evaluar la información provocada por la sorpresa. Así pues, la emoción precede al pensamiento
Explicación:
espero no me equivoque