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Respuesta:La región ahora conocida como Perú tiene una historia mítica. Los orígenes humanos datan en el octavo milenio antes de Cristo. Se desarrollaron patrones de aldeas organizadas, y varias culturas distintas comenzaron a surgir en 1500 a. C. Los Chavin y Sechin son los más conocidos de estas primeras civilizaciones; dejaron esculturas de piedra avanzadas de la iconografía religiosa, generalmente invocando al jaguar.
A medida que estas culturas se iban extinguiendo, una segunda ola de civilizaciones distintivas surgió en su lugar. Los Paracas y los Saliner dejaron sofisticados tejidos y cerámicas como legado. De la cultura Paracas surgió el misterioso Nazca.
La población de Nazca formó parte de los arquitectos que hicieron las increíbles líneas. Las líneas son una serie de dibujos en más de 50 millas del desierto del sur del Perú, llamados geoglifos. Estos dibujos incluyen el famoso mono, araña, pájaro y figura humana que agita, así como varias otras líneas y dibujos más pequeños. Los dibujos son enormes, lo suficientemente grandes como para que solo se puedan ver vagamente desde las torres de observación. Se descifran mejor desde el aire, que es donde surge el misterio. La población de Nazca nunca podría haber visto sus propios dibujos desde el aire, por lo que surge la pregunta sobre las motivaciones de los arquitectos ¿Para quiénes fue creado? Uno de los recorridos de tu viaje a Perú debe incluir las líneas de Nazca, para que puedas formar tus propias opiniones sobre su misterio.
Cuando Nazca y otras civilizaciones coincidentes comenzaron a desaparecer, el poderoso Inca surgió. La civilización Inca comenzó como un pequeño “municipio” en el valle del Cuzco a mediados de la década de 1400. Cuzco siguió siendo el centro militar y político de los incas cuando comenzó a expandirse. En menos de un siglo, el Imperio Inca se extendió desde Colombia hasta el noroeste de Argentina. La sede del emperador inca, Cuzco se convirtió en la ciudad más rica de las Américas. Fue construido en forma de jaguar, y los viajeros aún pueden caminar por su bosquejo.
Los incas tuvieron éxito en su expansión, obviamente debido a su gran habilidad militar y planificación, pero también porque incorporaron los mejores aspectos de cada cultura que conquistaron en la suya. Las asimilaciones pacíficas eran comunes; los emisarios eran enviados como gobernantes externos, quienes enviaban a sus hijos a Cuzco para ser educados.
Francisco Pizarro desembarcó en las costas del Pacífico en la región ecuatoriana en 1532, su llegada coincidió con el final de una guerra civil desestabilizadora entre dos gobernantes incas. Él y su séquito asesinaron a Atahualpa y tomaron fácilmente la región norte del imperio. Pizarro continuó hacia el sur hasta Cuzco y saqueó la ciudad. Los incas continuaron luchando ferozmente durante varios años; La ciudad perdida de Machu Picchu fue una de sus últimas fortalezas. El dominio español ya había comenzado.
Los incas desaparecieron cuando sus ciudades fueron destruidas, y la viruela y otras enfermedades europeas arrasaron la región, pero dejaron atrás su sublime piedra y arquitectura. El jaguar de Cuzco todavía levanta la cabeza y Machu Picchu se levanta a través de las brumas con el sol.