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Respuesta:La pandemia de Covid-19 no es solo una emergencia sanitaria sin precedentes, sino que es una emergencia económica y social, cuya magnitud y consecuencias están teniendo un impacto dramático en las familias más vulnerables. De acuerdo con las proyecciones recientes de CEPAL, la caída de un 5,3% del PIB y el aumento de un 3,4% del desempleo en América Latina generará un aumento de la pobreza en 4,4 puntos porcentuales (llegando a 34,7% de la población regional), y de la extrema pobreza de 2,6 puntos (llegando a 13,5% de la población regional) y de la desigualdad.
Si bien la crisis está afectando a toda la población, la actual situación agudiza factores de riesgo ya existentes, que afectan mayoritariamente a la población más vulnerables del país. Resulta especialmente preocupante la situación que enfrentan las familias de menores ingresos con niños, niñas y adolescentes, considerando que previo a la crisis, la pobreza infantil en Chile prácticamente duplicaba a la pobreza en otros tramos de edad. De acuerdo con la encuesta CASEN 2017, los hogares con niños presentan mayores carencias que aquellos que no los tienen, situación que se agudiza en la población indígena, inmigrante y que se vive en zonas rurales. La amenaza de la carencia económica desestabiliza a las familias, generando condiciones de estrés e incertidumbre que aumenta la probabilidad de violencia hacia niños, niñas y adolescentes.
A 30 años de la ratificación de la Convención sobre los Derechos del Niño, UNICEF hace un llamado al gobierno y a todos los poderes de Estado a adoptar “todas las medidas administrativas, legislativas y de otra índole” para dar efectividad a los derechos reconocidos en la Convención. La capacidad del país, y el compromiso de los distintos actores para fortalecer el sistema de protección social con foco en la niñez y adolescencia, será clave para no hipotecar los logros alcanzados durante las últimas tres décadas para la población menor de 18 años.
En momentos de crisis, como la actual pandemia, es donde los países deben demostrar con acciones su verdadero compromiso con la niñez y adolescencia.
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