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El lobo, cuyo nombre científico es Canis lupus, es un carnívoro perteneciente a la familia de los cánidos. Como ya sabemos, se trata de un animal salvaje que, se cree, dio origen a los actuales perros domésticos. No obstante, el comportamiento y la infinidad de características de estos últimos pueden diferir bastante de las de los lobos.
Existen diferentes subespecies de lobos, entre ellas el lobo ibérico (Canis lupus signatus), el cual se encuentra protegido en España por su descenso poblacional debido a la caza indiscriminada, los atropellos en carreteras, etc. Es por ello por lo que debemos valorar a estos grandes e importantes mamíferos y saber más sobre los mismos. En este artículo de ExpertoAnimal, podrás conocer algunas características del lobo que te pueden resultar muy interesantes en cuanto a su anatomía, alimentación, reproducción y personalidad.
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Índice
Anatomía del lobo
Alimentación del lobo
Reproducción del lobo
Personalidad del lobo
Otras características de los lobos
Anatomía del lobo
Como bien hemos mencionado, existen numerosas subespecies o tipos de lobo, las cuales pueden adoptar tamaños y características diferentes. Sin embargo, la gran mayoría suelen medir entre 1 y 2 metros de longitud desde el hocico hasta la cola, pesar entre 30 y 60 kilogramos y tener una altura de aproximadamente 80 centímetros desde el suelo hasta la cruz del animal.
En cuanto al esqueleto, musculatura y otras partes anatómicas, es verdad que el lobo es prácticamente igual que el perro doméstico, como podemos ver en este artículo sobre Diferencias entre lobos y perros, pues cuenta con una larga columna vertebral, 13 pares de costillas, cuatro patas marchadoras y una dentadura provista de fuertes caninos, entre otros. No obstante, hay que destacar algunas diferencias como:
Mayor tamaño del cráneo.
Orejas normalmente ovaladas.
Una musculatura más poderosa que le permite alcanzar grandes velocidades.
Dientes de mayor tamaño para desgarrar a grandes presas.
Hocicos más alargados.
Unas extremidades anteriores algo más largas que las posteriores, agilizando así su movimiento.
Unas almohadillas gruesas, puesto que apoyan su peso sobre los dedos a la hora de desplazarse (digitígrados).
A todo esto hay que añadir otras características del lobo que le hacen ser un animal asombroso e intimidante, como su peculiar mirada, donde predominan coloraciones marrones, amarillentas o anaranjadas.
Respecto a su pelaje, se puede diferenciar dos capas: una interna de tacto suave cuya función es proteger al animal de la temperatura ambiental y otra externa más dura cuya función es protegerle de otros factores externos como la lluvia. Esta última adopta diferentes colores dependiendo de que subespecie de lobo se trate y donde habite. De este modo, pueden existir lobos con un pelaje gris, blanco, negro, marrón, rojizo o un conjunto de estas tonalidades. En los lugares más fríos, la cantidad de pelo será mayor y en los lugares más calurosos se encontrará en menor abundancia, dando un aspecto más delgado al carnívoro.
Características del lobo - Anatomía del lobo
Alimentación del lobo
Se trata de un animal principalmente carnívoro, por lo que en la naturaleza es común verle alimentándose de otros animales más pequeños o incluso algunos con tamaños mayores. Pero como todo, esto no siempre es así, pues en los hábitats donde escasean las presas también pueden comer algún que otro vegetal. No son tan voraces como otros animales salvajes y al día pueden llegar a consumir entre 1 y 3 kilogramos de carne, dependiendo del tamaño del lobo y de las necesidades de la manada. Entre los alimentos habituales podemos destacar:
Serpientes y otros reptiles.
Conejos.
Roedores.
Aves.
Cabras.
Ovejas.
Cerdos.
Ciervos.
Si quieres tener más información sobre qué comen los lobos, puedes leer este otro artículo de ExpertoAnimal sobre La alimentación del lobo.
Reproducción del lobo
Dentro de una manada de lobos, la cual suele estar compuesta por entre 7 y 20 individuos, el apareamiento se lleva a cabo únicamente entre el macho alfa y la hembra beta una vez al año. Tras un periodo de gestación de 60 días aproximadamente, nacen las crías en camadas de entre 5 a 12 individuos, conformando normalmente la manada.