• Asignatura: Religión
  • Autor: elgamer777
  • hace 9 años

como demostramos que ya no nos domina el pecado sino la bondad inmerecida

Respuestas

Respuesta dada por: SharonTF
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Imagino que la bondad inmerecida a la que te refieres es a la de Dios para con nosotros. Básicamente para reconocer que la bondad de Dios es manifiesta en nosotros o en otros, basta con  aplicar la ley de Mateo 7:16-18 "16 Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos?

17 Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos.

18 No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos buenos."
 Ciertamente es a través del bautismo que elegimos y manifestamos que morimos al viejo hombre (Efesios 4:22 -En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a las concupiscencias engañosas-). Hay dos bautismos el de inmersión en agua que indica públicamente que somos de Cristo y nacemos de nuevo; pero es el del Espíritu el que nos hace literalmente morir al viejo hombre plagado de pecado y nacer de nuevo siendo capaces de ir dejando el pecado. Sin embargo ¿por que si somos "cristianos" aun hacemos cosas malas(pecado)? pues pueden pasar dos cosas: la primera es que realmente no hemos nacido de nuevo y todavía seguimos y queremos seguir viviendo de la misma manera, y lo otro que podría pasar es que Si somos verdaderos hijos de Dios pero que estamos en un proceso de lucha en contra de ese mal hábito. Porque hay algo fundamental que entender, el hecho que el pecado no nos  "domine", eso no implica la ausencia de el. Esto es porque ya nuestra carne tiene la marca del pecado, y es en esto que se manifiesta la bondad de Dios, en que aun pecando es decir rompiendo la ley y yendo en contra de El, Dios envió a su hijo a pagar nuestra deuda de muerte que nosotros hemos tenido puesto que pecamos y la ley universal es " la paga del pecado es la muerte" esta es una ley como que la gravedad es una fuerza de atracción hacia el centro de la tierra,es simplemente parte del universo. Jesucristo hijo de Dios (Dios hecho carne) vino para  revertir eso y darnos vida, solo por su Gracia es decir su "bondad inmerecida" y aunque no nos domina el pecado aun siendo cristianos estamos propensos a pecar pero cuando Jesucristo venga el hará lo "corruptible" o sea nuestro cuerpo que tiene tendencia al pecado aun cuando morimos al viejo hombre, entendiéndose espiritualmente; lo hará "incorruptible" es decir que el Espíritu Santo aun en este cuerpo nos va santificando pero cuando vuelva Jesucristo pronto, el nos limpiara 100% del pecado y la tenencia hacia el.  
Para manifestar la bondad de Dios en todos momento lo primero es la oración, sin esto olvídate que algo va a cambiar puesto que no eres tu con tus fuerzas sino el Espíritu Santo que mora en ti. Ama a Dios!, dile que te muestre su personalidad a través de su palabra y de todo lo que veas, sientas, oigas, hables y pienses; si confías en que el te esta escuchando y lo va a hacer entonces da por hecho que Dios se manifestara y te enamoraras de El. Puesto que el es extremadamente cautivador, desde tu interior, de lo más profundo va a estallar el deseo por Dios y el celo de cumplir su ley y el agradecimiento hacia El, y esto se va a notar hasta en la forma en la que miras, sin embargo no te obligues a amar a Dios es el Espíritu Santo el que hace el cambio y el que te manifiesta a Dios haciendo inevitable que tu alma quiera estar ligada a El.
Entonces recuerda pedirle sabiduría a Dios para demostrar la Maravillosa Gracia que el nos ha concedido ya que El da a todos y de forma desbordante solo pidiéndoselo. Y también recuerda que el hecho que seamos cristianos implica que el pecado NO nos domina pero no hay una total ausencia de el. Y para reconocer en ti o en otros aplica la ley universal SIEMPRE de "por sus frutos los conoceréis"  esto obviando los frutos materiales e identificando los espirituales, emocionales, psicológicos, comportamientos, etc pero TODOS en el ámbito cristiano. 
Espero que te sea de ayuda! cualquier otra pregunta, a la orden.
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