cuáles son las diferencias y características de los recursos hidricos de la zona húmeda y de la zona árida de argentina ?
Respuestas
Respuesta:
El presente Informe corresponde a la “Asistencia técnica y apoyo para los estudios a
realizar en las cuencas de la zona Nordeste de Argentina orientados en la identificación
de potenciales nuevas áreas de regadíos y áreas de riego complementario”, acordados
por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO),
la Fundación ArgenINTA, y el Instituto Nacional del Agua (INA).
El objetivo central establecido en dicha Asistencia Técnica es identificar el potencial del
país para el desarrollo de nuevas áreas de riego y caracterizar a cada una de éstas
desde una dimensión Hidrológica (disponibilidad hidrológica, análisis de oferta/demanda
hídrica de los sistemas, etc).
Se establecía para ello la realización de un diagnóstico de la información disponible,
tanto en estaciones de cada provincia como en documentación bibliográfica y como
producto final la entrega de un estudio hidrológico, el cual contempla la aplicación de
modelos para la evaluación de recursos hídricos, la cuantificación y el estudio de las
demandas para la realización posterior de balances para analizar la disponibilidad de
recursos y su garantía. Se compromete la presentación de tres informes, uno de los
cuales es: Informe de caracterización de los recursos hídricos superficiales, que es
el que se presenta en este capítulo.
La región Nordeste mencionada incluye las provincias de Formosa, Misiones, Chaco,
Corrientes, Santa Fe, Entre Ríos y Zona Este de las provincias de Santiago del Estero y
Córdoba.
Como tal se corresponde mayoritariamente con la porción húmeda y subhúmeda de la
Cuenca del Plata en territorio argentino, donde las actividades agrícolas son
preponderantemente de secano, pero que debido a la variabilidad climática natural que
presenta, el riego complementario ha pasado a ser un factor de importancia, para
mejorar y garantizar la producción. La disponibilidad de agua está directamente relacionada con la cantidad y época de
ocurrencia de las precipitaciones, cuya distribución geográfica depende de diversos
factores, entre los principales se pueden citar las áreas con altas y bajas presiones
permanentes, la distancia al mar y la topografía.
Las zonas de bajas presiones determinadas por la circulación general de la atmósfera,
como la ecuatorial o la de latitudes medias, favorecen la formación de nubes
generadoras de lluvias, mientras que en las zonas de altas presiones predominan los
desiertos. A medida que aumenta la distancia al mar disminuye la disponibilidad de
humedad y, por lo tanto, bajan los montos de precipitación; finalmente, la orografía,
como un elemento topográfico, produce aumento o disminución de la cantidad de agua
precipitable favoreciendo la llegada de vientos húmedos o impidiendo su paso por las
montañas.
Las características climáticas generales han sido resumidas del libro “El Río Paraná en
su tramo Medio” de Paoli y otros (2000), donde se indica:
“Durante el verano en el hemisferio sur, la costa oriental es más cálida que la costa
occidental. No obstante, esta característica no prevalece durante todo el año, ya que en
el invierno la fría Corriente de las Malvinas influencia las costas orientales, y las
temperaturas mensuales son prácticamente las mismas en ambos litorales desde el
extremo sur hasta 30° de latitud sur. Al norte de los 23° de latitud sur, una gran
diferencia se presenta durante el invierno. Durante el verano (generalmente entre los
meses de enero y abril) la presencia ocasional del fenómeno El Niño (que implica el
movimiento de aguas tropicales hacia el sudeste a lo largo de las costas de Ecuador y
Perú, que desvía la Corriente de Humboldt alejándola del continente en estas áreas)
disminuye las diferencias térmicas entre las costas.
La alta cadena de montañas que se alinea en el borde occidental de América del Sur,