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Las cianobacterias
Hasta no hace mucho se llamaban también algas verde azuladas, aunque, por su gran parecido con las bacterias, se utiliza el nombre de cianobacterias. Constituyen un grupo de móneras que contiene varios tipos de pigmentos, los cuales les proporcionan colores característicos; no todas las cianobacterias son verde azuladas, ya que las hay rojas, amarillas e incluso negras.
Todas las cianobacterias son autótrofas, pues también poseen clorofila, lo que les permiten realizar la fotosíntesis.
La importancia de las cianobacterias
Las algas verde azuladas viven en ambientes húmedos tales como charcas, estanques, lagos, arroyos, mar, etc. Estas algas aguantan las altas temperaturas de las fuentes termales; algunas pueden vivir sobre árboles o rocas, y otras se asocian con hongos para formar líquenes.
Su capacidad para realizar la fotosíntesis las convierten en uno de los principales productores de oxígeno y materia orgánica en los ecosistemas acuáticos.
Las bacterias
Por su forma, las bacterias se clasifican en:
a) Esféricas, llamadas cocos. Pueden asociarse formando parejas, cadenas o racimos (diplococos, estreptococos y estafilococos).
b) Alargadas, en forma de bastón. Son los bacilos.
c) En espiral. Reciben el nombre de espirilos.
d) En forma de coma. Son los vibriones.
La mayoría de las bacterias son heterótrofas y viven como saprofitas sobre materia orgánica muerta, o en simbiosis con otros organismos. Algunas viven parásitas en el interior de otros seres vivos. Existen también bacterias autótrofas que poseen clorofila para la fotosíntesis, y otras que obtienen la energía de reacciones químicas inorgánicas. Las bacterias se reproducen por bipartición y a gran velocidad. En condiciones óptimas, algunas especies se pueden dividir cada veinte o treinta minutos colonizando rápidamente cualquier tipo de medio.
Las bacterias resistentes
Cuando las condiciones son desfavorables, muchas bacterias se rodean de una gruesa pared y se convierten en esporas. De esta forma pueden resistir largos períodos de sequía, heladas, e incluso el agua hirviendo. Cuando las condiciones son de nuevo favorables, la espora se convierte en una bacteria activa. Las esporas son, por lo tanto, formas de resistencia y no un modo de reproducción.
Entre las especies que forman esporas muy resistentes existen dos que llegan a causar la muerte:
- El clostridium botulinum produce el botulismo y se encuentra en conservas mal esterilizadas.
- El clostridium tetani causa el tétanos si infecta heridas en personas no vacunadas.
La mayoría de las bacterias son útiles
Existen muchos tipos de bacterias beneficiosas, como las que producen fermentaciones, las que viven en simbiosis en el interior de nuestro organismo o las que hacen posibles los ciclos biogeoquímicos. Entre las fermentaciones producidas por bacterias tenemos la fermentación láctica, por la que se obtienen yogur y algunos tipos de quesos. También intervienen en la producción de mantequilla, en la transformación del vino en vinagre, en la obtención de la fibra de algodón para fabricar ropa y en muchas otras industrias.
Las bacterias también son útiles para el tratamiento de basuras y desechos orgánicos, para el tratamiento de aguas residuales y para producir metano (biogás) que es usado en la industria. Recientemente se utilizan bacterias capaces de degradar hidrocarburos para combatir las mareas negras.
Las bacterias simbióticas
Entre las bacterias que podríamos denominar beneficiosas, destacan las que establecen relaciones simbióticas con otros organismos. Podemos citar las siguientes:
- Las bacterias que viven en simbiosis en el interior del intestino humano constituyen la llamada flora intestinal normal. No sólo no nos perjudican, sino que nos ayudan en la digestión y sintetizan algunas vitaminas.
- En el interior del estómago de los rumiantes existen bacterias que digieren la celulosa.
- Las bacterias del género rhizobium viven en simbiosis en las raíces de las leguminosas (guisantes, judías, etc). Fijan el nitrógeno del aire y lo convierten en amoníaco que pasa a formar parte de las proteínas de la planta. Más tarde, este nitrógeno se convertirá en nitratos y nitritos que enriquecen el suelo.
Respuesta:
Organismos pluricelulares.