DOY CORONA AL QUE ME AYUDE!!escribe un breve texto argumentando como crees que debería continuar el
reclamo por las Islas Malvinas actualmente. porfa si no saben la repuesta no contesten,gracias
Respuestas
Antecedentes:
El Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda tomó posesión del archipiélago en 1833, cuando las islas estaban en posesión argentina. El largo diferendo por la soberanía territorial devino en 1982 en la guerra de las Malvinas, en la que las islas constituyeron el principal teatro de operaciones. En febrero de 1990 Argentina y el Reino Unido restablecieron las relaciones diplomáticas, que habían sido interrumpidas en abril de 1982, mediante la adopción de una fórmula de salvaguardia de soberanía sobre las islas Malvinas, Georgia del Sur y Sándwich del Sur y los espacios marítimos circundantes, llamada «paraguas de soberanía». Fórmula que se aplica a todas las reuniones bilaterales sobre aspectos prácticos vinculados a Malvinas, así como a las declaraciones y actos de las partes o de terceros que tengan lugar como consecuencia de lo convenido en las reuniones.
Puntos de vista:
El descubrimiento de las islas según el Reino Unido:
El Reino Unido sostuvo, y formalmente aún sostiene, que el primer europeo en avistar las islas fue el capitán John Davis, al mando del navío Desiré después de que desertara de la expedición corsaria de Thomas Cavendish, el 14 de agosto de 1592. Sin embargo no describió ni fijó siquiera vagamente las coordenadas del presunto hallazgo, solo ubicó a las islas en relación a la costa y al estrecho de Magallanes.
El descubrimiento de las islas según España
Existen una treintena de mapas confeccionados previamente, a esa fecha, en donde es posible ver islas que pueden ser las Malvinas. Aunque no hay certeza plena sobre qué expedición avistó por primera vez las Malvinas y su identificación en algunos mapas es dudosa, hay suficiente evidencia para afirmar que ya habían sido avistadas antes de 1592.
Derechos:
Derechos geográficos
Continuidad geográfica. De acuerdo a la opinión de Argentina las islas Malvinas tienen continuidad geológica con su territorio continental emergiendo frente a sus costas a menos de 400 km como parte de la plataforma continental patagónica. Este argumento de la continuidad geográfica con el continente ha sido utilizado por la corona de España cuando Buganvilla les entregó las islas en 1766, quien expresó que España las había reivindicado como una dependencia del continente de la América meridional. También aparece en el decreto del gobierno de Buenos Aires del 10 de junio de 1829: (...) hallándose justificada aquella posesión por el derecho del primer ocupante, por el consentimiento de las principales potencias marítimas de Europa y por la adyacencia de estas islas al Continente que formaba el Virreinato de Buenos Aires, de cuyo Gobierno dependían
Derechos históricos:
España había basado sus derechos sobre las en las bulas Inter caetera y Dumdum liquiden del papa Alejandro VI en 1493, y en el Tratado de Tordesillas.
Las islas habían sido avistadas por un buque de Fernando de Magallanes en su viaje de la vuelta al mundo, antes del supuesto descubrimiento atribuido a John Davis en 1592, en épocas en que el mero descubrimiento otorgaba derechos de dominio eminente. Las islas fueron una herencia colonial de España hacia Argentina
Derechos jurídicos
Tanto España como Argentina efectuaron una «ocupación efectiva» de las islas, principio que el Reino Unido y los principales países europeos reconocían entonces como título esencial para la adquisición de la soberanía territorial.
Considera que la ocupación británica de Puerto Egmont (1765-1774) fue:
ilícita, por considerarla violatoria de los tratados vigentes;
clandestina, por haber permanecido oculta hasta su descubrimiento por parte de los españoles;
tardía, porque ocurrió con posterioridad a la ocupación francesa;
contestada, porque España opuso resistencia y reservó sus derechos;
parcial, porque se redujo a Port Egmont en una isla pequeña, a la vez que España poseía Puerto Soledad en la isla principal;
breve, porque solo duró ocho años;
precaria, al ser abandonada en 1774.