Necesito una poesía de 9 estrofas sobre La Paz
No soy un de pueblo de bueyes,
que soy de un pueblo que embargan
yacimientos de leones,
desfiladeros de águilas
y cordilleras de toros
con el orgullo en el asta.
Nunca medraron los bueyes
en los páramos de España.
¿Quién habló de echar un yugo
sobre el cuello de esta raza?
¿Quién ha puesto al huracán
jamás ni yugos ni trabas,
ni quién al rayo detuvo
prisionero en una jaula?
que soy de un pueblo que embargan
yacimientos de leones,
desfiladeros de águilas
y cordilleras de toros
con el orgullo en el asta.
Nunca medraron los bueyes
en los páramos de España.
¿Quién habló de echar un yugo
sobre el cuello de esta raza?
¿Quién ha puesto al huracán
jamás ni yugos ni trabas,
ni quién al rayo detuvo
prisionero en una jaula?
Respuestas
Respuesta dada por:
8
Si el mundo un día pudiera
Sin razas y sin fronteras
Sin distinción de creencias
cantar un himno a la paz
Donde sólo un corazón
a todo hombre reuniera
Bajo la misma bandera
yo juraría por Dios
No existir amor más fuerte
sobre la faz de la tierra
Todas las manos todas
todos los pueblos todos
todas las voces todas
Bajo una sola bandera
Si el mundo un día pudiera
reunir todos los colores
Culturas los amores
de sus patrias sus creencias
sin muros y sin fronteras
Del cielo Dios bajaría
Bendecir esta tierra donde por fin el amor
logro La Paz y la unión bajo la misma bandera
Sin razas y sin fronteras
Sin distinción de creencias
cantar un himno a la paz
Donde sólo un corazón
a todo hombre reuniera
Bajo la misma bandera
yo juraría por Dios
No existir amor más fuerte
sobre la faz de la tierra
Todas las manos todas
todos los pueblos todos
todas las voces todas
Bajo una sola bandera
Si el mundo un día pudiera
reunir todos los colores
Culturas los amores
de sus patrias sus creencias
sin muros y sin fronteras
Del cielo Dios bajaría
Bendecir esta tierra donde por fin el amor
logro La Paz y la unión bajo la misma bandera
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Vientos del pueblo me llevan,
vientos del pueblo me arrastran,
me esparcen el corazón
y me aventan la garganta.
Los bueyes doblan la frente,
impotentemente mansa,
delante de los castigos:
los leones la levantan
y al mismo tiempo castigan
con su clamorosa zarpa.