Respuestas
Respuesta:Emiliano Zapata nació el 8 de agosto de 1879 en Anenecuilco, Morelos. Aunque la historia oficial lo presenta como un campesino pobre que se levantó en armas, lo cierto es que era un pequeño propietario, dueño de un pedazo de tierra para cultivar. En 1909 fue presidente de la Junta de Defensa de las Tierras, al iniciar sus gestiones contactó al anarquista Ricardo Flores Magón, al periodista revolucionario Paulino Martínez y el profesor Otilio Montaño. Zapata envió a Pablo Torres a entrevistarse con Francisco I. Madero para unirse a su lucha pues el Plan de San Luis incluía un párrafo agrarista. Encabezó al Ejército Libertador del Sur con la que continuó su lucha durante la Revolución Mexicana. Al romper la alianza con Madero en la cuestión agraria, sobre todo por el reparto de tierras, se levantó en armas con el Plan de Ayala, el 25 de noviembre de 1911, en el que se plasmó el lema de la tierra es de quien la trabaja, lo que no convenía a los intereses de los grandes terratenientes como Madero. En esta época ya se le conocía como el Caudillo del Sur, estaba aliado con Francisco Villa, pero cuando éste rompió relaciones con Venustiano Carranza, su alianza también se acabó. Después de la toma de la capital de la República por los constitucionalistas, Carranza encargó la campaña del Sur en contra de Zapata al general Pablo González, quien el 2 de mayo de 1916 ocupó la Plaza de Cuernavaca. Pablo González y el preboste del Ejército licenciado Luis Patiño fraguaron un plan para hacerle creer a Zapata que el coronel Jesús Guajardo había desconocido al gobierno de Venustiano Carranza. Poco a poco se fue ganando su confianza hasta que finalmente lo traicionó y asesinó en una emboscada en Chinameca, Morelos. El cuerpo del Libertador del Sur fue llevado a su pueblo natal, Anenecuilco, y sus restos reposan actualmente en Cuautla, al pie de la estatua que le fue erigida. Muchas historias comenzaron después de su muerte, algunos campesinos y habitantes de la zona aseguraban que Zapata no había muerto y que se le veía montando por los cerros de la región, reflejo quizá de la esperanza perdida de recuperar sus tierras. Se dice que después de los constantes atentados de que era objeto, o se sentía objeto, hicieron que Emiliano usara a un «doble» para ciertos eventos públicos. La gente lo identificaba porque, si bien era muy semejante al caudillo, su doble era más bajo de estatura; además, Zapata nunca usaba calzón de manta: siempre andaba de traje charro, armado y acompañado de su caballo.