Respuestas
Respuesta:
Los malos habitos alimenticios son:
No desayunar.
Picotear.
Tomar muchos refrescos, aunque sean lights.
No beber la cantidad de agua suficiente.
Consumir bebidas alcohólicas.
No llevar una dieta variada.
Comer demasiado rápido.
Esto te podria causar muchas enfermedades.
Respuesta:
Comer fuera con demasiada frecuencia
Salimos a cenar o comer fuera y casi sin darnos cuenta hemos comido el doble (o más) de lo que haríamos estando en casa. Y si bien en casa podemos cuidar de que los ingredientes sean más saludables, poco control tenemos sobre lo que se usa en servicios de restauración. Cenar fuera de vez en vez está muy bien, convertirlo en hábito cotidiano es una mala idea para nuestra salud. Una alternativa puede ser preparar cenas “especiales” en casa o en casa de amigos, donde el reto sea precisamente preparar platos muy saludables y deliciosos.
Dejar pasar muchas horas sin comer
Un clásico de los malos hábitos alimenticios. Pasamos por alto la merienda y cuando llegamos a casa, poco más y terminamos vaciando la nevera. Para evitarlo, los especialistas en nutrición no paran de recomendar realizar 5 y hasta 6 comidas al día: desayuno, tentempié de mañana, comida, merienda y cena. De esta manera evitaremos los atracones y nos sentiremos mucho mejor durante toda la jornada.
Comprar productos poco saludables
El primer paso para terminar a reventar de M&M's es comprarlos, el segundo dejarlos a la vista en casa y el tercero llevarlos en el bolso o dejarlos en el escritorio del trabajo. Si los tienes los vas a comer. Los hábitos saludables no van de voluntad, van de planificación y modificación de conducta y ambiente. Si no queremos seguir consumiendo alimentos pocos saludables, no debemos comprarlos. En su lugar compremos frutas y verduras y, esas sí, las debemos colocar bien a la vista, en un frutero sobre la mesa, por ejemplo.
Comer demasiado rápido
Un hábito poco saludable que muchas veces se pasa por alto. Error. El cerebro necesita entre 15 y 20 minutos para mandar la señal de que estás saciado, ¿no te ha sucedido que engulles una porción significativa de comida sin sentirte satisfecho? ¿y a los pocos minutos la sensación de estar muy lleno te invade? Pues eso, el cerebro, que lleva su paso. Es mejor comer lentamente, bebiendo agua de manera frecuente (nada de gaseosas, por favor), así seremos más coherentes con la cantidad que realmente necesitamos ingerir.
Explicación:
1. No desayunar
No es noticia que por ser la primera comida, el desayuno es una de las instancias más importantes. Un buen desayuno debe poseer hidratos, proteínas, grasas y vitaminas. Si no respetamos esta primera comida, nos faltarán las vitaminas necesarias para afrontar la jornada.
2. Picotear
Cuando no comemos lo suficiente en los horarios que debemos, lo que sucede es que el cuerpo comienza a sentir hambre antes de tiempo y, para saciarla, comemos lo primero que encontramos sin importar la hora.
3. Tomar muchos refrescos, aunque sean lights
Es sabido que los refrescos son elaborados en base a muchos azúcares, por lo que no es bueno abusar de ellos. Incluso cuando se trata de refrescos light que contienen menos de una caloría, sus efectos no son buenos dado que suelen ser gaseosos.
4. No beber la cantidad de agua suficiente
Está comprobado que el cuerpo necesita al menos dos litros de agua al día, por eso, lo mejor no es esperar a tener sed, sino beber agua en cualquier momento del día.
ESPERO QUE TE AYUDE.