Respuestas
Explicación:
Principales problemas y retos en el ámbito de la salud está dedicado al análisis de los principales factores causales (problemas de salud y determinantes de la salud), los que representan los mayores retos y la mayor carga para la población de la Región. Estos retos y problemas se analizan en tres temas convergentes: los problemas de salud que se consideran cruciales debido a su gravedad, alta prevalencia, costos asociados o impacto a largo plazo en la salud de la población; los determinantes ambientales y sociales que están fuera del control directo o exclusivo del sector de la salud; y los obstáculos que se derivan de la falta de preparación de muchos sistemas de salud para hacer frente a los retos planteados por los problemas de salud y sus determinantes, en particular las inequidades generalizadas y prevalecientes. Las metas de salud ya no se limitan a reducir la prevalencia o incidencia de las enfermedades, o a mejorar los servicios de salud, sino que también tienen como propósito reducir las inequidades en materia de salud, mediante la inclusión de la salud como parte de todas las políticas y la comprensión de que la salud es tanto un componente como un factor crucial para el desarrollo sostenible.
En el tema 1 se analizan los avances de la Región en cuanto a la reducción de la carga de las enfermedades transmisibles en los últimos cinco años, a la vez que se abordan las inequidades que subsisten dentro de los países y las grandes brechas entre los países en los resultados generales de salud como la morbimortalidad materna e infantil. Si bien las enfermedades crónicas están aumentando, en algunos países la carga atribuible a las enfermedades transmisibles y el número de muertes maternas e infantiles, incluidas las carencias nutricionales, son aún altos y no pueden subestimarse en la transición a la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. La persistencia, emergencia y reemergencia de algunas enfermedades infecciosas asociadas con la pobreza y con cambios en el contexto físico y social ponen de relieve la necesidad de reforzar las actividades de vigilancia continua a fin de prevenir que surjan nuevas cepas patógenas de arbovirus. Ha habido un resurgimiento del cólera en la Región, así como brotes recientes de dengue. Además del dengue, han surgido nuevas epidemias de enfermedades arbovirales, principalmente brotes causados por el virus del chikunguña y el del Zika. La epidemia del Zika provocó una importante crisis de salud pública debido a las nuevas manifestaciones clínicas en los recién nacidos relacionadas con síndromes del desarrollo neurológico y la microcefalia, que pueden provocar morbilidad y discapacidad a largo plazo. Por otro lado, es necesario centrarse más en las disparidades para subsanar las brechas que obstaculizan el progreso hacia el desarrollo sostenible.
En el tema 2 se abordan los cambios demográficos, epidemiológicos y socioeconómicos sin precedentes que han llevado a un aumento de las enfermedades no transmisibles (ENT), los trastornos mentales, las discapacidades, los traumatismos causados por el tránsito y la violencia doméstica e interpersonal, que han pasado a ocupar los primeros lugares entre los principales problemas de salud que requieren políticas multisectoriales. Dos enfoques fundamentales para abordar las ENT son los determinantes sociales de la salud y la perspectiva del curso de la vida, temas ambos que se tratan ampliamente en Salud en las Américas+ 2017. La capacidad y el alcance de los sistemas de salud deben mejorarse no solo para proporcionar atención a las personas en riesgo o a las que ya padecen alguna ENT, sino también para construir la salud a lo largo del curso de la vida. Fomentar la capacidad de autocuidado es una parte fundamental de los esfuerzos necesarios para superar los retos que surgen por la transición epidemiológica y demográfica y por los subproductos del desarrollo desordenado. La violencia es uno de los subproductos que se asocian con la gobernanza débil, el Estado de derecho deficiente, el aumento de la desigualdad de ingresos y las oportunidades educativas limitadas, y las mujeres y los niños son sus víctimas más frecuentes. Los problemas de salud mental, en particular la depresión, también llevan a una morbilidad significativa y se exacerban en situaciones de conflicto y desastres naturales. La tasa alta de suicidios en algunos países es también un motivo de preocupación.