Respuestas
Respuesta:
La virtud es un hábito adquirido, es decir, no brota espontáneamente de la naturaleza humana, sino que es preciso adquirirla por la repetición de actos, mediante esfuerzo y tenacidad en la práctica del obrar bien.
Explicación:
La felicidad no tiene que ver con los placeres, sino más bien con la plenitud de la vida. ”La felicidad resulta ser una actividad del alma de acuerdo con la virtud”, escribe Aristóteles.
Según Aristóteles, la felicidad consiste en lograr, a lo largo de toda la vida, todos los bienes -salud, riqueza, conocimiento, amigos, etc.- que conducen a la perfección de la naturaleza humana y al enriquecimiento de la vida humana. Podríamos decir que la felicidad coincide con la abundancia entendida como el desborde de la plenitud en todas las áreas de la vida.
Por eso, la felicidad requiere también tomar decisiones que pueden a veces ser difíciles, elegir la gratificación retardada. Más que todo, requiere desarrollar un buen carácter y la fuerza de voluntad para hacer lo correcto, incluso en situaciones difíciles. Entonces, la felicidad, es antes que nada quienes somos y no lo que logramos. La felicidad no depende de las circunstancias externas, aunque sean difíciles. Por lo tanto, en las circunstancias del presente, tenemos una oportunidad preciosa para desarrollar este estado del ser. Porque, “solo hay felicidad donde hay virtud y esfuerzo serio, pues la vida no es un juego”, dice Aristóteles.