Respuestas
Respuesta:
Muy facil :D
Explicación:
1- Dedícate un momento:
Dedica media hora al día en hacer algo que te guste: Lee un libro, pasea un rato, desarrolla una manualidad, haz deporte. Debe de ser algo que disfrutas sobremanera, desconectando por completo de todo lo que te rodea. Eso te ayudará además a no dedicar demasiadas horas al trabajo. El equilibrio es vital para asegurarse longevidad.
2- Actitud:
Hay muchas formas de mejorar la actitud y hacerte sentir mejor: Si te rodeas de gente malhumorada, dejas que todo te afecte, no aceptas ni buscas ayuda y cargas con demasiados problemas es más que probable que el estrés haga mella en tí. Desestima la influencia de gente negativa, rodéate de gente proactiva y eficiente y verás como tu grupo de trabajo se ve impulsado y reforzado.
No se trata de sobrevalorarse sino de tomar conciencia de la importancia dentro del grupo, de la empresa y valorar la calidad del tiempo que invertimos en ello.
3- No temas el cambio:
La degradación de tu estado de ánimo es algo normalmente progresivo y por norma tememos los cambios bruscos. infórmate, pregunta, sé curioso y verás como los cambios aparecerán ante tus ojos cuando parecía que era algo imposible.
4- Organízate:
Todos hemos dicho más de una vez una de estas dos frases: «me falta tiempo» o «tengo demasiado trabajo», y sin embargo en la mayoría de los casos son la consecuencia de una falta de organización. Hay muchas horas en un día y reservar una hora al día en organizarte, discernir lo más importante que has de realizar, y organizar tu tiempo en bloques que deberás respetar para cumplir con todo harán que desaparezcan de tu vocabulario.
También es importante que «controles la tecnología»: demasiadas horas contestando emails o whatsapps matan tu tiempo de trabajo. Atrévete a quitar el volúmen de tus cacharros tecnológicos para centrarte en tus tareas. Y reserva el contestar a todos a su debido tiempo.
5- Haz un poco más familiar y agradable tu lugar de trabajo:
Una planta, unas fotos, algunos objetos que te gusten… es también vital que mantengas tu lugar de trabajo limpio y ordenado, además de bien iluminado. ¡Y al turrón!