Respuestas
Respuesta: La economía colombiana ha caído en una trampa de bajo crecimiento. Mientras el país creció a tasas promedio anuales superiores a 4,5% entre 2004 y 2014, el dinamismo reciente ha caído a menos de la mitad, alcanzando apenas 1,8% el año pasado. Esta desaceleración tiene serias implicaciones económicas y sociales. El buen desempeño que tuvo la economía durante más de una década permitió que el desempleo se ubicara por debajo de 10%, que diez millones de colombianos salieran de la pobreza y que cinco millones accedieran a la case media. Con la actual desaceleración, esos logros están empezando a verse amenazados.
Ser testimonio de nuestra opción por la
economia solidaria ante la sociedad, invitando al cambio personal e institucional
para construir una economía centrada en
la dignidad de la persona.
• Aplicar criterios de economía solidaria
en nuestra propia organización, siendo responsables en nuestras prácticas
económicas, consumiendo productos de
comercio justo y/o solidario, siendo cliente de banca ética.
• Construir una economia solidaria como
una opción transversal a toda la actividad de las Cáritas Diocesanas y no tanto
como programas aislados.
• Crear proyectos comunes confederales,
para trabajar todos juntos por el bien común y respetando el testimonio concreto
de cada realidad.
• Impulsar la formación de todas las
personas vinculadas con Caritas, especialmente directivos/gerentes, para ser
capaces de acompañar y dirigir bajo unos
criterios claros enmarcados dentro de la
economía solidaria.
• Concienciar y sensibilizar a la comunidad y a la sociedad de la importancia que
puede tener la economia solidaria para la
dignidad de la persona y la lucha contra
la pobreza.
• Fomentar el trabajo en red con todos
aquellos que estén comprometidos en la
construcción de un modelo en el que la
persona sea el centro.
• Incidir, tanto en la Administración como
en empresas, para que desde su responsabilidad pública adopten medidas
que favorezcan la construcción de una
economía solidaria.