1. Women's clothes in the past
be uncomfortable.
2. My mum
put on high heels whenever she went out.
wear glasses, but now she wears them all
3. My granny
the time.
go swimming every
4. When I was at the seaside, I
morning.
have expensive clothes
5. My family was poor and we
when I was young.
6. I
be slimmer when I was a kid.
Respuestas
Respuesta:
La fantasía se repite. Estoy entre una multitud, asintiendo con la cabeza, pero solo escucho la conversación a medias. El líquido de mi vaso se ha calentado a una temperatura desagradable. Me duelen los pies por los zapatos poco prácticos, tal vez con tacones, tal vez algún tipo de bota pesada y adornada. Saludo a través de la habitación a un conocido, y mis pilas de brazaletes chocan entre sí, distrayéndome momentáneamente de los pellizcos de un sujetador sin tirantes de elaborada ingeniería que desengancharé de manera preventiva en el taxi a casa.
Cuánto anhelo tal incomodidad.
Los dispositivos de tortura de la moda, previamente demonizados como herramientas para desempoderar a las mujeres (vestidos de cóctel, corsés, pantimedias, bolsos de tamaño extraño), han adquirido un tono completamente nuevo en la pandemia, mientras que la ropa cómoda es alabada como sus mejores reemplazos (chándales, zapatos planos). ) ahora son sinónimo de estar atrapado en casa: limitado, restringido. Cada vez es más evidente que las valoraciones morales que atribuimos a la ropa se derivan de asociaciones.
Los tacones, o, digamos, las faldas de tubo que inducen a patinar, solo se apretaban cuando se podía argumentar con razón que las mujeres estaban presionadas para que las usaran, cuando existía la sugerencia de una falta de elección. ¿Qué pasa con esa teoría cuando la opción de usarlos básicamente desaparece? ¿Y cuando la sed de ponérselos aparece por sí sola, sin influencia de la mirada o de la ocasión, en una tranquila mañana de martes, mientras comes las sobras de comida para llevar junto a la nevera entre videollamadas? Encerrados, podemos apreciar lo que nos hace sentir libres: lo que queremos, lo que extrañamos.
A veces, resulta que es una moda compleja y problemática. Ropa que nos hace sentir algo, aunque sea una incomodidad.
Explicación: