¿Qué entiende por justicia?
¿Quién representa a la justicia?
¿Cómo se aplica la justicia?
¿Describa un ejemplo de justicia?
¿Describa un ejemplo de injusticia en la sociedad?
Respuestas
Explicación:
Significado de Justicia
Qué es la Justicia:
La justicia es un conjunto de valores esenciales sobre los cuales debe basarse una sociedad y el Estado. Estos valores son el respeto, la equidad, la igualdad y la libertad.
En un sentido formal, la justicia es el conjunto de normas codificadas que el Estado, a través de los organismos competentes, dicta, hace cumplir y sanciona cuando son irrespetadas, suprimiendo la acción o inacción que generó la afectación del bien común.
Tipos de justicia
Existen cuatro enfoques o formas de aplicar la justicia:
Justicia distributiva
Se basa en la distribución equitativa de la riqueza o recursos, de tal manera que todos los ciudadanos se vean beneficiados.
Se trata de una forma de administrar la justicia que proviene del pensamiento aristotélico y cuya aplicación ha resultado controversial en la práctica, dado que no hay unanimidad sobre los criterios que se deben considerar para que dicha distribución sea de provecho para todos los involucrados.
Para algunos autores, debe privar la equidad (que cada persona obtenga la riqueza que merece según su esfuerzo). En otros casos, prevalece el concepto de igualdad (todos las personas deben obtener la misma cantidad), mientras que otros autores creen que la riqueza debe distribuirse en mayor cuantía en los casos de mayor necesidad.
Justicia restaurativa
Este tipo de justicia se concentra en el bienestar de la víctima más que en el castigo del victimario. En este sentido, lo que se busca es reparar de forma material o simbólica el daño causado.
Según este enfoque, víctima y victimario deben involucrarse en la búsqueda de justicia. Para ello, el victimario debe entender y reconocer el daño que ha causado.
Un ejemplo de justicia restaurativa son los Programas de Reconciliación Víctima y Ofensor (Victim-Offender Reconciliation Programs), establecidos en comunidades de Estados Unidos y Canadá en los que las partes involucradas se reúnen, hablan sobre los sucedido y la manera en la que les afectó, y acuerdan la forma de restaurar el daño causado.
Justicia procesal
Este tipo de justicia establece normas y reglas que deben ser respetadas por todas las personas por igual, y establece sanciones de diversa índole en caso de que los ciudadanos incurran en falta.
Para ejercer este tipo de justicia es necesario tener un criterio imparcial, mientras que para ser procesado por ella se requiere la representación de un experto en la materia, es decir, un abogado.
La administración de la justicia procesal se lleva a cabo en los tribunales y en los organismos creados por el Estado para tal fin.
Justicia retributiva
La justicia retributiva establece que cada persona debe ser tratada de misma forma en la que trata a otros, por lo tanto, al incurrir en una falta debe ser castigada. Lo que se espera de este tipo de justicia es que el efecto retroactivo persuada a otras personas de incurrir en delitos.
Un ejemplo de justicia retributiva serían las violaciones a los derechos humanos, en los que si bien no siempre los perpetradores reciben el castigo de manera inmediata, eventualmente son castigados por la justicia local o por organismos internacionales.
Justicia social
El término "justicia social" no tiene un origen claro, pero se sabe que comenzó a implementarse en el siglo XVIII en Europa para referirse las normas que debían cumplirse a fin de mantener el orden social.
En ese sentido, parte de las obligaciones de un monarca eran disponer cuáles serían las leyes o reglas que permitieran la convivencia y sus respectivas sanciones en caso de ser violentadas.
Sin embargo, el término adquirió nuevas connotaciones a finales del siglo XIX con el surgimiento de la Revolución Industrial, el consecuente capitalismo y las nuevas dinámicas económicas y sociales. En ese entonces, el movimiento socialista británico se encargaría de adoptar el concepto para proponer una repartición equilibrada de los bienes dentro de una sociedad, lo cual recuerda a la visión aristotélica de la justicia distributiva.
En 1919, al terminar la Primera Guerra Mundial, la Organización Mundial del Trabajo incorporó esta noción en el primer artículo de su constitución, expresando que solo es posible la paz permanente si está basada en la justicia social.
Mientras que en 1931, la Iglesia Católica menciona por primera vez el término en su Doctrina Social, usada por el Papa Pío XI, quien expresó que la justicia social debía ser aplicada de tal forma que redujera la brecha entre los acaudalados y lo más pobres.
Por otro lado, en el año 2007 la Organización de las Naciones Unidas proclamó el día 20 de febrero de cada año como Día Mundial de la