Respuestas
Respuesta:
Incrementar los sistemas forestales, agrosilvícolas y silvopastoriles.
2. Incrementar la rugosidad del terreno: se debe controlar la escorrentía mediante zanjas de ladera, realizar cultivos en contorno y utilizar franjas con vegetación densa.
3. Proteger el suelo con cobertura vegetal y residuos de cultivos, lo cual disminuye la acción destructora de la lluvia sobre el suelo.
4. Evitar la labranza en el sentido de la pendiente; esta debe ser reducida y mínima o de siembra directa en pendientes menores al 30 por ciento.
5. Evitar la compactación del suelo, específicamente la de la explotación ganadera y la de la maquinaria agrícola.
Aumentar la calidad del suelo, una tarea indispensable
El 68,1% del país cuenta con tierras con bajo contenido de materia orgánica. Algo preocupante, ya que es la encargada de retener agua y nutrientes, de mejorar la estructura y productividad del suelo, y es la que más interviene en el aumento de la calidad de este recurso natural.
Las tierras de la llanura del Caribe, los valles interandinos, la Orinoquia, Amazonia y La Guajira, albergan este tipo de suelos.
Por su parte, los suelos con alto contenido de materia orgánica abracan el 10,1%, y están distribuidos en manglares, suelos orgánicos, páramos húmedos y terrenos con ceniza volcánica.
Para aumentar la “calidad de los suelos”, el IGAC enfatiza que se deben aplicar cuatro prácticas de manejo: