Respuestas
Respuesta: Se ha discutido mucho sobre el origen de la forma piramidal en la construcción humana. Las pirámides surgieron en distintas civilizaciones sin contacto entre sí, lo que ha dado pie a multitud de especulaciones de toda índole. Sin embargo, desde un punto de vista meramente estructural o constructivo, la forma piramidal es un resultado casi inevitable del simple deseo de ganar altura utilizando piedra.
En la antigüedad, la arquitectura común empleaba materiales fáciles de conseguir y manipular, tales como el barro o la madera. No obstante, este tipo de construcciones no perduraban en el tiempo. Cuando se deseaba un edificio más longevo, como una tumba, o un edificio emblemático, se recurría entonces a la piedra (o al ladrillo si no se disponía de lo primero). Las primeras construcciones de piedra por tanto obedecieron a propósitos funerarios o religiosos, y tanto en Egipto (mastabas) como en América, aunque miles de años después, ya adoptaron una forma tronco piramidal.
Con el tiempo, se empezaron a edificar tumbas y plataformas religiosas encima de las anteriores1 (quizás con la intención de manifestar mayor poder que el predecesor). Este tipo de prácticas derivó en las pirámides escalonadas; un tipo de construcción muy similar a los zigurat mesopotámicos.
No queda constancia de los motivos que impulsaron el paso desde este punto a la típica pirámide pentaédrica, aunque no es descabellado pensar que el salto formal fuera simplemente estético.1
Explicación: dame corona