Monarcas franceses del siglo XVI que implantaron una monarquía absolutista y centralizada, combatiendo así el protestantismo...
Respuestas
Respuesta:
Sería Luis XVI y su esposa María Antonieta
Y luego vendría el terror sembrado por Robespierre
Explicación:
Luis XVI
Nació en Versalles, Francia, en 1754. Era nieto del Rey Luis XV e hijo del Príncipe Luis de Francia. Desde joven refljeaba poco interés en las cuestiones políticas y mostraba un carácter tímido y reservado que fue considerado como un defecto en una persona de débil carácter.
Su padre murió en 1765 y él se convirtió en el nuevo príncipe. En 1770 se casó con la hija de la emperatriz de Austria, María Antonieta. Cuatro años más tarde, en 1774, el rey Luis XV murió a consecuencia de la viruela negra y Luis XVI se convirtió así en el nuevo rey a la edad de 20 años junto a Maria Antonieta.
Los historiadores señalan que Luis XVI era influenciado a nivel político por su mujer y la nobleza. De hecho, sus primeras medidas económicas de carácter liberal fueron rechazadas por los nobles.
-Derrocamiento y guillotina
El gobierno de este monarca encontró una gran oposición en los más privilegiados de la sociedad por las medidas económicas que quería implantar, lo que provocó una crisis interna. Esta situación, sumada al descontento que comenzó a surgir por parte del conocido como ‘Tercer Estado una asamblea de representantes del pueblo, fue lo que acabaría derivando en la revolución Francesa
Los representantes del pueblo constituyeron la Asamblea Nacional en 1789 después de que no se decretara el voto por persona y juraron no disolverse hasta que hubiera una constitución en Francia. Luis XVI, con la presión de la corte, preparó una intervención del ejército pero las masas parisinas tomaron las armas y asaltaron la Bastilla para defender la Asamblea.
El rey acabó aceptando la Constitución de 1791 que convertía el país en una monarquía constitucional en lugar de absolutista y limitaba el poder de la corona. Luis XVI trató de escapar y de pedir ayuda a otros monarcas extranjeras, pero fue interceptado. Posteriormente vivió con la familia real en el Palacio de las Tullerías donde se sentían como prisioneros con escaso poder.
Sería en 1792 cuando una revuelta popular, que pretendía destronar al rey e instaurar una comuna, asaltó el palacio y encarcelaron al monarca. Se suspendió entonces la realeza y posteriormente Luis XVI fue juzgado por traición y condenado a la guillotina. Hubo diputados como Robespierre que votaron en contra de su ejecución, pero la mayoría aprobó su muerte. Fue ejecutado el 21 de enero de 1793 en la Plaza de la Revolución.