Respuestas
Explicación:
Los ecosistemas acuáticos son numerosos y abundantes en vida, por lo que suelen presentar complejas cadenas tróficas, de animales adaptados a las condiciones puntuales del agua: su salinidad, sus corrientes, etc. En el caso de los ríos, mucho de ello dependerá de los elementos terrestres arrastrados o disueltos por la corriente, así como de la presencia o ausencia mineral o de materia orgánica en los suelos que recorre.
Con la excepción de los anfibios y reptiles acuáticos, muchos de los cuales se desenvuelven en el agua pero retornan a tierra a desovar (o viceversa), la mayoría de los animales de estos ecosistemas están adaptados a la permanente inmersión en el agua, por lo que dependen del equilibrio biótico de ésta.
Lo mismo ocurre con la flora, en su mayoría compuesta por algas, corales y otras formas fotosintéticas que abundan en las regiones más superficiales, donde hay más luz solar. En las ciénagas, en cambio, donde el agua es oscura y llena de restos orgánicos, la vida se adapta a la baja concentración del oxígeno.