elabora en tu cuaderno una fábula que la moraleja sea sobre el control del enojo
que no sea la de la tortuga
Respuestas
Respuesta:
había una vez un niño llamado pablo que siempre se enojaba, un día llego un niño nuevo este niño se llamaba Mario y tenia muchos amigos y todos sus amigos conocían a pablo y su carácter, pablo quiso hacerse amigo de Mario pero este ultimo ya conocía su carácter por lo que le habían contado y quiso ayudar a pablo a controlar su enojo , ya que creía que un amigo era lo que necesitaba y , efectivamente después de un tiempo pablo tuvo una mejor actitud y mas amigos. moraleja
TEN UNA BUENA ACTITUD , CONTROLA TU ENOJO Y TENDRAS MUCHOS AMIGOS
Explicación:
espero té sirva
Respuesta:
El león gruñón
Había una vez un león muy gruñón que gobernaba en la jungla. Todas sus órdenes se cumplían sin vacilación. El león creía que todos lo querían y respetaban pero en realidad sus súbditos lo seguían por temor, sabían que no toleraba fallos y que conseguirse un castigo por hacerlo enojar era algo fácil.
Una vez el león enfermó y ordenó a quienes consideraba sus caballeros mas leales reunirse. Fue así como llegaron el oso, y el lobo a verle.
-Señores, estoy enfermo. Para curarme requiero que uno de ustedes vaya a conseguir agua fresca de la cima del monte mas alto del reino. Es un trabajo peligroso que puede costarles la vida pero alguien debe hacerlo.
-Yo voy señor- dijo el lobo.
-Espera, lobo. No me interrumpas que sabes que no me gusta. ¿Es que quieres que te haga golpear?- respondió el león - Uno de ustedes debe ir a traer el agua y otro debe quedarse a cuidar de mí.
-Déjeme ir a mí por el agua, señor- dijo el oso.
-Yo pedí primero, por favor déjeme ir por el agua- dijo el lobo. Ambos renuentes a permanecer mucho tiempo con el león gruñón.
-Lárguense y déjenme pensarlo- el león aunque tenía mal genio, estaba complacido por saber que sus caballeros sacrificarían sus vidas por trarle la cura. -Estoy muy cansado para decidirlo ahora. Vuelvan mañana a esta hora y les diré a quién escojo para cada tarea. PERO QUE SE VAYAN, DIJE!
Al día siguiente al despertar, el león se sentía muy bien, visitó a su médico quien le dijo que estaba curado. Alegre, pensó en ir a decirle a sus caballeros que ya no necesitaría que uno de ellos arriesgara la vida y tampoco los cuidados del otro.
Pero al acercarse donde estos estaban pudo escucharlos hablar:
Prefiero morir antes que estar cuidando a ese viejo enojón- decía el oso.
Nunca lo he soportado, se enoja por todo. Si me pide que sea yo el que cuide de él tendré que huir del reino- decía el lobo.
Al escuchar esto, el león comprendió que su enojo lo alejaba de quienes consideraba sus amigos. Comprendió que debía ser más alegre y controlar su enojo o de lo contrario nunca tendría amigos verdaderos.
Explicación: