Respuestas
Respuesta:
Se propone descomponer la idea inespecífica de igualdad o, mejor, justicia distributiva, en las más específicas de igualdad estricta, equidad (acorde con la contribución o el esfuerzo), excelencia (incentivos a las aportaciones extraordinarias) y solidaridad (compensación para los discapacitados). Estos son los criterios de justicia de la sociedad actual - aunque no haya acuerdo sobre como alcanzarlos - y la escuela no necesita inventar otros sino adaptarlos a su contexto. Por otra parte, se diferencia entre las desigualdades intracomunitarias - clase, género y etnia - y las intercomunitarias - entre países, entre comunidades, entre nacionales e inmigrantes.
Palabras Clave: Igualdad; Equidad; Excelencia; Solidaridad; Discriminación; Clase; Género; Etnia; Ciudadanía.
El concepto de igualdad está ya tan hondamente enraizado en el ámbito de la educación que, de hecho, ha pasado de significarlo todo a significar poco o nada, a fuerza de servir y ser utilizado para designar concepciones muy distintas sobre cuáles hayan de ser en él los criterios de la justicia distributiva. Sin embargo, como idea-fuerza sigue presidiendo los mejores esfuerzos individuales y colectivos de los educadores y políticas educativas o, cuando menos, se convierte en una referencia obligada de las justificaciones individuales, las reivindicaciones colectivas y las políticas públicas. En este trabajo intentaremos abordar, sucesivamente: a) los conceptos de igualdad y equidad y, separadamente, el de incentivo; c) la desigualdad de oportunidades en las sociedades nacionales y d) en la sociedad humana y, finalmente, e) la solidaridad frente las desigualdades naturales.
A) Igualdad, equidad e incentivos
En otro lugar (Enguita, 2000a) he argumentado en detalle que el conjunto de recursos al que toda persona puede acceder legítimamente podría descomponerse en tres grandes categorías: su recolección, su retribución y su recompensa. Su recolección es simplemente el ejercicio de su derecho a la apropiación de los recursos naturales, su parte alícuota en lo que ya estaba ahí con anterioridad a él y a cualquier otro, o con independencia de él y de cualquier otro. Su retribución es la contrapartida por su participación en la producción medida por su esfuerzo, es decir, por su trabajo (y, eventualmente, por su espera - o sea, su capital, su trabajo acumulado), y proporcional al mismo. Su recompensa es el premio extraordinario a su aportación especial a la producción o mejora de los recursos sociales, aquello a lo que se le otorga derecho por encima de su esfuerzo. El Cuadro I resume estas y otras características de los tres grupos de recursos citados.
Explicación: