ACTIVIDAD
A veces pensamos que para ser misioneros es necesario irse a otro país a anunciar a Cristo,
ser catequista, religiosa o sacerdote. Pero todos somos y debemos ser misioneros. A
continuación, escribe tu propio plan de misión y deseribe que actividades o iniciativas puedes
tener para anunciar a Jesus en tu familia, tu barrio, tu colegio
Respuestas
Respuesta:
cómo misionar en nuestra vida diaria?, para responder esta pregunta, basemonos en una frase de San Francisco de Asís, que dice:
“Predica el evangelio en todo momento, y cuando sea necesario utiliza las palabras”. El gran Santo de Asís, nos enseña que no necesitamos discursos extensos, para que la gente sepa de la existe un Dios, quien verdaderamente nos ama y nos enseña por medio de su palabra a ser felices. No se necesita ir, por ir al áfrica, o a lugares lejanos, y aunque allí se requieran misioneros, lo que Dios pide a nosotros es es que brillemos desde donde estemos.
Explicación:
Todos los bautizados, aún cuando no sientan la vocación específica a ser misioneros realizando actividades específicamente misioneras (anunciar el evangelio a los no cristianos y alejados), pueden participar de la misión de la Iglesia de las siguientes maneras:
* Dando testimonio de Jesucristo con la propia vida.
* Rezando por las Misiones y los Misioneros. Una forma de oración por las misiones es el Rosario Misionero.
* Ofreciendo sacrificios por las Misiones y los Misioneros. Los enfermos y ancianos pueden especialmente ser misioneros a través del ofrecimiento de su sacrificio.
* Colaborando materialmente con las Misiones y los Misioneros, principalmente a través de la Colecta Mundial por las Misiones el segundo domingo de Octubre.
En el colegio
En el cole también podemos ser misioneros ayudando a los compañeros que necesiten ayuda en clase, o en el patio, o el comedor... Cuando somos misioneros nuestro corazón se pone muy contento y nos hace ser un poquito más buenos y estar más cerca de Jesus
Misioneros en casa
Tenemos que ayudar en casa para que tus padres que te quieren tanto estén muy contentos, evitando disgustos, peleas familiares, estando atento a sus necesidades físicas y espirituales, conversando y confiando en ellos, dándoles seguridad respecto a nosotros.