• Asignatura: Castellano
  • Autor: sophiequelalyt
  • hace 4 años

1. SEPARE el texto en párrafos haciendo uso del punto y aparte.

“El verdugo”, de A. Koestler
Cuenta la historia que había una vez un verdugo llamado Wang Lun, que vivía en el reino del segundo emperador de la dinastía Ming. Era famoso por su habilidad y rapidez al decapitar a sus víctimas, pero toda su vida había tenido una secreta aspiración jamás realizada todavía: cortar tan rápidamente el cuello de una persona que la cabeza quedara sobre el cuello, posada sobre él. Practicó y practicó y finalmente, en su año sesenta y seis, realizó su ambición. Era un atareado día de ejecuciones y él despachaba cada hombre con graciosa velocidad; las cabezas rodaban en el polvo. Llegó el duodécimo hombre, empezó a subir al patíbulo y Wang Lun, con un golpe de su espada, lo decapitó con tal celeridad que la víctima continuó subiendo. Cuando llegó arriba, se dirigió airadamente al verdugo: - ¿Por qué prolongas mi agonía? -le preguntó-. ¡Habías sido tan misericordiosamente rápido con los otros! Fue el gran momento de Wang Lun; había coronado el trabajo de toda su vida. En su rostro apareció una serena sonrisa; se volvió hacia su víctima y le dijo: -Tenga la bondad de inclinar la cabeza, por favor.

EL QUE ME RESPONDA BIEN LE REGALO CORONA :,)
NO RESPONDAN SI NO SABEN >:,C

Respuestas

Respuesta dada por: areliandrs2909
37

Respuesta:

“El verdugo”, de A. Koestler

Cuenta la historia que había una vez un verdugo llamado Wang Lun, que vivía en el reino del segundo emperador de la dinastía Ming.

Era famoso por su habilidad y rapidez al decapitar a sus víctimas, pero toda su vida había tenido una secreta aspiración jamás realizada todavía: cortar tan rápidamente el cuello de una persona que la cabeza quedara sobre el cuello, posada sobre él.

Practicó y practicó y finalmente, en su año sesenta y seis, realizó su ambición.

Era un atareado día de ejecuciones y él despachaba cada hombre con graciosa velocidad; las cabezas rodaban en el polvo.

Llegó el duodécimo hombre, empezó a subir al patíbulo y Wang Lun, con un golpe de su espada, lo decapitó con tal celeridad que la víctima continuó subiendo.

Cuando llegó arriba, se dirigió airadamente al verdugo: - ¿Por qué prolongas mi agonía? -le preguntó-. ¡Habías sido tan misericordiosamente rápido con los otros! Fue el gran momento de Wang Lun; había coronado el trabajo de toda su vida.

En su rostro apareció una serena sonrisa; se volvió hacia su víctima y le dijo: -Tenga la bondad de inclinar la cabeza, por favor.

ESPERO Y ESTE BIEN

ME DAS CORONA  (。◕‿‿◕。)


sophiequelalyt: gracias :3 te daria corona pero no me deja :,v
areliandrs2909: okey, cuando te deje me das?(◕ᴥ◕ʋ)
Preguntas similares