Respuestas
La metáfora. Consiste en la trasferencia de significado entre dos palabras.
Por ejemplo: “Su cuello se parecía a una torre de marfil”, “Las ventanas del alma”.
La comparación. Se relaciona un término real con otro imaginario porque ambos tienen semejanzas.
Por ejemplo: “Su boca es como una rosa floreciente”, “Llueve como tarde de verano”.
La antítesis. Cuando se contraponen dos palabras antónimas en el mismo discurso.
Por ejemplo: “El frío y cálido beso de la diosa era inolvidable”, “La alegría y la tristeza lo embargaron cuando la vio llegar”.
La anáfora. Se basa en la repetición de uno o varios términos al comienzo del enunciado.
Por ejemplo: “Veo flores bellas, veo grandes palacios, veo nobles príncipes, veo barcos de guerra”, “Pienso en ti, pienso en todos, pienso en ti”.
El epíteto. Añadir adjetivos que caracterizan al sustantivo con el fin de alabar o criticar a alguien o algo.
Por ejemplo: “Horribles seres son sus hijos, horribles eran en su infancia y horribles serán en su vejez”, “Su andar cansino me perturba”.
La aliteración. Cuando se repite un fonema o un grupo de fonemas.
Por ejemplo: “El fugitivo se fugaba entre las estrellas fugaces de la fundida noche”, “Camino el camino sin un castigo”.